El pleno del Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Montilla-Moriles, celebrado ayer en el edificio Envidarte de Montilla, confirmó la caída de la producción de la vendimia que se espera para esta temporada y cuyo inicio ha tenido lugar esta misma semana. El gerente del Consejo Regulador, Enrique Merino, explicó a el Día que el pleno se centró en la actual vendimia, que ha tenido que adelantarse por las altas temperaturas registradas, y que en este caso se confirmó, precisamente a causa de la meteorología, una caída de la producción. Merino manifestó que el volumen de caída en este caso aún es complicado de saber, y que se conocerá a ciencia cierta una vez acabe la temporada. En cualquier caso, sí apuntó que hay quienes sitúan el descenso entre un "10% y un 15%" y otros que lo elevan a un "20% o 25%".

Durante el pleno del Consejo Regulador, añadió su gerente, también se aprobaron las normas de la vendimia que, en otras medidas, recogen la puesta en marcha de la tarjeta del viticultor. Merino explicó que se trata de la aplicación de un control de rendimiento de producción que se aplica a cada viticultor en función de los metros de parcela que posea para llevar el conteo de una zona que es la que más productividad aporta por espacio.

Además, también se habló del traslado de la sede de la DO desde edificio Envidarte hasta la Estación Enológica de Montilla. En este sentido, Merino apuntó que este cambio no se prevé efectuarlo a corto plazo porque todavía faltan una serie de permisos.

La primera vendimia de Europa arrancó hace un par de días en Montilla-Moriles con la recogida de la uva para vinos jóvenes, como Chardonnay o Sauvignon Blanc. Tras éstas vendrán las variedades tintas y, por último, la más importante, la pedro ximénez. La razón del adelanto de la recogida se ha debido a la brotación temprana de la vid por las altas temperaturas registradas durante la primavera.