Después de años de espera, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) dará solución a las habituales anegaciones que se producen en la zona baja de Monturque cuando hay lluvias. El organismo regulador de cuenca anunció ayer la licitación de las obras de acondicionamiento del arroyo Hondo junto a la travesía de la antigua N-331, una intervención para la que hay disponible una partida económica superior a los 392.000 euros y que cuenta con un plazo de ejecución de cinco meses. La alcaldesa monturqueña, Teresa Romero (PSOE), destacó ayer a el Día que el municipio "lleva mucho tiempo esperando" estas obras. Romero recordó las "numerosas" riadas que se han producido en la localidad en los últimos años, especialmente en 2009, "cuando hubo que rescatar a varios vecinos".

En el tramo coinciden el arroyo Hondo y el río Cabra. "No hace falta que haya lluvias torrenciales. Una sola tormenta provoca anegaciones por la estrechez de los cauces y porque no están bien mantenidos", dijo la primera edil. La solución adoptada por la CHG es "ampliar en lo posible el cauce del arroyo, dotándolo de una geometría uniforme, así como homogeneizar los materiales y actuar en el perfil longitudinal", según consta en la memoria.

Los trabajos se alargarán en 900 metros, junto a la travesía de la N-331

Los trabajos se prolongarán a lo largo de 900 metros. La intención de la CHG es conseguir la "máxima capacidad" debido a la proximidad de la N-331. Es por esto que los técnicos han trabajado con la premisa de caudal de 41,35 metros cúbicos por segundo, es decir, para un periodo de retorno de cien años, que es el estándar empleado en zonas urbanas consolidadas, como es el caso. Otro objetivo es "maximizar" el ancho del cauce entre las fachadas de las edificaciones existentes; así, el cauce oscilará entre los 3,77 metros y los 4,50 en el punto más amplio.

Los trabajos también irán encaminados a regularizar la pendiente, para lo que los técnicos han incluido en el proyecto zonas de transición al inicio de la actuación y en el estrechamiento que permitan el aumento de capacidad en estas zonas. Para la ejecución de estas obras, la memoria técnica incluye la demolición y retirada de árboles, los muros del encauzamiento actual, jardineras, bajantes y cobertizos, así como la sustitución del colector de aguas residuales bajo el cauce. En su lugar, la CHG instalará barandillas de acero inoxidable en ambas márgenes, repondrá las tuberías de abastecimiento y el colector de saneamiento y acondicionará la zona adyacente a la N-331 mediante una capa compacta de zahorra artificial.