LA concentración de la asamblea de parados de los barrios de Moreras y Palmeras tuvo ayer un punto ciertamente cómico cuando una pareja de agentes municipales se acercó al grupo para identificar a alguien, por medio de la presentación del DNI, como representante de las personas que protestaban. Una señora se volvió a los agentes y dejó meridianamente claro que, si querían los papeles, era cuestión de que identificaran a todo el mundo y que ya valía, que no estaban haciendo nada malo. Tal chaparrón le cayó a los agentes que dieron un paso atrás, dijeron buenas tardes y se fueron.

LA proximidad de las navidades están provocando un brote de solidaridad en toda la ciudad. Rara es a la asociación o colectivo que no ha programado alguna colecta o acto solidario para ayudar a los muchos necesitados que hay en estos tiempos duros. Las necesidades, sin embargo, se mantendrán después de Reyes. Es de esperar que este brote no quede sólo en estos días como tantas veces ocurre.