CUESTIONAR de una forma crítica el paradigma de la interculturalidad y hacer de la imagen un territorio abierto para la reflexión y el discurso son dos de las líneas de trabajo de Traslaciones, título que engloba tres exposiciones de la Sección Oficial de la XI Bienal de Fotografía de Córdoba.

De la misma forma que el modelo del multiculturalismo y la interculturalidad ha entrado en crisis desde los años 90, también la imagen fotográfica se ha ido expandiendo, desbordándose, abarcando nuevos territorios e interferenciándose con otros discursos y lenguajes de lo que actualmente denominamos como cultura visual contemporánea.

Desde estas premisas es desde las que se aborda un proyecto expositivo como Traslaciones, que a partir de tres escenarios, Localizaciones de lo global en el Palacio de la Merced, Escrito al margen en la Sala Orive y Mapas del sujeto en Vimcorsa, reflexiona sobre el otro y abre el debate sobre la condición histórica de la imagen fotográfica y su capacidad para construirnos como individuos de un mundo postglobalizado.

Abrumados por la lógica de la circulación y distribución de las imágenes, en el casi centenar de piezas que componen las exposiciones gracias a la colaboración de 19 artistas de la talla de Beat Streuli, Dennis Darzacq, Sergio Belinchón, Monserrat Soto, Willie Doherty, Pierre Gonnord, Sophie Calle, Humberto Rivas, Juan Pablo Ballester, Txomin Badiola, Dario Villalba, Jordi Colomer, Rogelio López Cuenca o Candida Höfer, entre otros, y con un proyecto que es asumido por tres comisarios de una forma conjunta y global, se intenta cortocircuitar este flujo continuado para hacer que nos detengamos a leer las imágenes.

Aterrizando sobre la imagen contemporánea como si de un satélite se tratase, en Localizaciones de lo global se plantean distintos escenarios que de una forma geopolítica y cultural ponen en crisis el paradigma de lo intercultural.

En Escrito al margen, es el lenguaje, visual, escrito y hablado el que pone en cuestión la construcción de la identidad y de lo diferente, del otro y del uno mismo, partiendo de la premisa de que si venir al mundo es venir al lenguaje, como diría Sloterdijk, también es hacerlo a un mapa donde los territorios de la identidad y de la diferencia cada vez aparecen más desbordados.

Y por último, llegando a lo más íntimo de cada uno de nosotros, Mapas del sujeto aborda las mutaciones y cambios que se producen en el territorio del sujeto contemporáneo, fluido, móvil y en tránsito.

Traslaciones como cambio y movimiento, pero también como necesidad e imposibilidad de traducirnos y comprendernos. Traslaciones como un espacio donde la imagen fotográfica empieza a moverse y expandirse. Traslaciones como un escenario para la complejidad, la inestabilidad y la fluidez.

Traslaciones como un paso adelante en una Bienal de Fotografía que desde su Sección Oficial asume de una forma reflexiva y crítica la cuestión de la imagen contemporánea y su importancia en la construcción de nuestros contextos culturales.