España es un sistema monárquico, impuesto por el Funeralísimo, como decía Rafael Alberti, y con un extraordinario blindaje constitucional. Monarquía que llegó al trono gracias al Dictador.

Además tenemos un presidente de Gobierno que tira al cubo de la basura todo su programa electoral, habla a través de un plasma, y manda un sms al tesorero de su partido encarcelado, "Luis, sé fuerte", que permite el dinero negro en la reparación de la sede de su partido y en las campañas electorales que él coordinó. Una secretaria general del PP y ahora Ministra de Defensa que no tiene ningún problema ni vergüenza en salir a una rueda de prensa con una laberíntica explicación de lo imposible y permitir que los martillos hicieran desaparecer pruebas judiciales contra la contabilidad B de su partido imputado.

Una expresidenta de comunidad autónoma y presidenta del PP, en cuyo territorio han surgido numeroso casos de corrupción, para después aparecer como adalid contra la corrupción, para terminar siendo cazatalentos. Y una alcaldesa que vende viviendas públicas a fondos buitre comercializados por su hijo. Una exministra que no se enteraba de los coches que entraban en el garaje de su casa fruto de las mordidas. Y la que la releva Dolors Montserrat con una deuda de dos millones de euros con Hacienda. Un presidente de una comunidad autónoma, Monago, que viaja a Canarias para fines particulares con dinero público.

Una comunidad autónoma, Andalucía, en la que se han dilapidado millones de euros en cursos de formación y en la tramitación de numerosos ERES. Un expresidente de Cataluña con cuentas en el extranjero y la mayor parte de sus hijos incursos en delitos de corrupción. Unos ejecutivos que malgastan dinero de una entidad financiera salvada con dinero público, usando unas tarjetas para gastos diversos, bares, prostíbulos, perfumes… Un presidente del Consejo del Poder Judicial, que se montaba unos fines de semana caribeños para el desempeño de sus "tareas profesionales", con escoltas, coche oficial y hoteles y restaurantes de lujo.

Un presidente de la CEOE en la cárcel. Y el que lo precede acusa las mujeres de ser culpables de la crisis económica que vivimos. Y una población que sigue votándolos. La RAE puede cambiar la definición de república bananera y sustituirla por ESPAÑA.

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