Editorial

Espectáculo sensato y responsable

DOS años después de que el Consorcio de Turismo planteara la puesta en marcha de un espectáculo de luz y sonido en la Mezquita-Catedral como elemento necesario para incrementar las pernoctaciones de los turistas en Córdoba, el único espectáculo del que somos testigos es el que están ofreciendo los encargados de llevar la iniciativa a buen término. Lejos de haber consolidado el que ha sido uno de los reclamos básicos de la promoción turística de la ciudad en las dos últimas ediciones de Fitur, la visita nocturna al principal templo de la diócesis sigue estancada y a la espera de una solución que, afortunadamente, puede ser que salga a la luz en un mes. Eso sí, con unas considerables modificaciones sobre el proyecto inicialmente planteado.

Y es que el Cabildo Catedralicio ha impuesto una serie de restricciones importantes para poder ejecutar la iniciativa, tales como evitar que la Catedral se convierta en una suerte de parque de atracciones con música y proyecciones que desvirtúen su condición de iglesia con culto. Es lógico este planteamiento de los cuidadores de la Catedral, que deben velar porque ésta mantenga su esencia. Menos lógicas suenan las excusas que ofrecen los técnicos sobre los problemas eléctricos que pueden surgir, sobre todo si tenemos en cuenta que en las grandes celebraciones eucarísticas se despliegan en el templo varias pantallas gigantes. Recordamos aquí la misa funeral en memoria del Papa Juan Pablo II.

Del mismo modo, es lógico que el Consorcio y los empresarios busquen un espectáculo relevante para fomentar las noches de hotel de los visitantes en la ciudad. Sin embargo, esto no se debe hacer a cualquier precio. Así, no es lícito descalificar a los canónigos y tildarles de irresponsables e insensatos cuando el proyecto presentado elude el hecho básico que supone el culto religioso que existe en la Catedral.

Es, por tanto, momento de reclamar cordura a las partes para que en el mes de plazo que se han dado sean capaces de articular un producto satisfactorio para todos y, principalmente, para la ciudad.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios