Editorial

Cambio histórico en Pozoblanco

POZOBLANCO puso fin el lunes al culebrón que ha marcado su día a día desde hace tres meses -por no decidir desde el inicio del mandato municipal-. En un pleno que pasará a la historia, el candidato del PP, Baldomero García, lograba hacerse con la Alcaldía gracias a los votos de su grupo, del PA y del ex alcalde socialista, Benito García. Llegaba de este modo el colofón de una historia de desencuentro político que arrancó el Miércoles Santo, cuando el ex alcalde despojaba a dos de sus ediles socialistas de sus atribuciones y desencadenaba una crisis en su partido que ha acabado con su propia expulsión. El cambio operado en la capital de Los Pedroches es además histórico, pues echa del sillón de regidor al PSOE por primera vez desde que se restauró la democracia en España y coloca al partido en una gravísima crisis interna de la que no le será fácil salir. Y es que los socialistas no se han dejado en el camino exclusivamente el gobierno de la ciudad, sino que también han perdido a más de 50 militantes que han entregado su carné en una localidad considerada desde siempre un bastión inexpugnable de la izquierda. Asimismo, ponen en manos del PP el epicentro económico de la comarca, elevan las alcaldías que regentan los populares a seis -además de Pozoblanco, Añora, Villanueva de Córdoba, Dos Torres, Torrecampo y Villanueva del Duque- y les ofrecen un impulso determinante para que puedan terminar su aterrizaje en una zona donde también están a un edil de gobernar en Hinojosa, la tercera población en importancia de Los Pedroches. Se encuentra así el PSOE ante un grave problema en una comarca que determina también la composición de la Diputación, a la vez que recibe un serio aviso en la línea de que en menos de dos años debe articular alternativas de gobierno para retomar el poder en la zona. Mención aparte merece el espectáculo ofrecido por unos y otros desde las direcciones provinciales, con cruces de acusaciones cada vez más toscos e impropios de mentes preparadas. Lo importante es Pozoblanco y su futuro, no quien ostenta mayores cuotas de poder. Tienen dos años para demostrar que esto es cierto.

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