Análisis

rafa rojas

El CCF necesita del bombo de Incondicionales

No se puede pedir apoyo a la afición y quitarle literalmente los medios para expresarlo durante un partido de fútbol. El sábado, durante el encuentro ante el Numancia, ocurrió un hecho casi sin precedentes en el fútbol cordobés y me atrevería a decir que en el fútbol profesional. El club, en una actitud fratricida, decidió retirar a una de las peñas más activas del último lustro, Incondicionales, uno de sus bombos de animación. La medida no tiene explicación y de haberla tendría que haber sido comunicada. No sabemos si hubo alguna actitud provocadora, si alguna de las mazas para hacerlo sonar fueron arrojadas al terreno de juego, si el ruido era tan atronador que el árbitro comunicó a nuestro amigo Manuel Torralbo, veterano delegado de campo, que debía ser retirado para poder continuar el partido o cualquier otra situación absurda. Puestos a buscar algún motivo nos resulta bastante difícil de encontrar. Algo debió pasar de gravedad para que fuera requisado porque de no ser así eso no se le ocurre ni al que asó la manteca. Pero me extraña mucho conociendo el talante de los integrantes de esta peña.

No soy dudoso a la hora de valorar las decisiones del presidente saliente y del actual cuando se ha hecho las cosas mal o bien. En esta ocasión Alejandro González, posiblemente mal asesorado, tomó una decisión poco acertada porque ahora parece que las peñas podrían hacer una huelga de bombos caídos. Equivocarse es humano y de sabios es rectificar. Creo que la medida y, sobre todo, los integrantes de este grupo de animación se merecen una rectificación y una satisfacción. De ser así, seguro que en el próximo partido todo continuaría como si nada hubiera pasado porque seguro que volverían a animar con todo al equipo de su alma. En estos momentos el Córdoba necesita el bombo de Incondicionales y de toda la grada y de la cordura y el sentido común del palco.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios