Cultura

La cultura y sociedad cordobesas despiden a Pablo García Baena

  • Empresarios, políticas, cofrades, amigos y escritores pasan por la capilla ardiente del poeta de Cántico

Escritores, amigos, empresarios, cofrades y políticos pasaron a lo largo del día por la capilla ardiente de Pablo García Baena, el último poeta del Grupo Cántico, fallecido ayer a los 96 años a causa de una enfermedad respiratoria. Su faceta como maestro de varias generaciones de poetas, su carácter afable, su gran humanidad y su sencillez han sido los aspectos en los que han coincidido todas las personas que han acudido al Salón de Plenos del Ayuntamiento a darle su último adiós. La capilla ardiente estuvo abierta hasta las 20:00.

Su túnica y medallón de la Hermandad de los Dolores están posadas en el féretro de García Baena, al que acompañan varias coronas de flores: del Ayuntamiento de Córdoba, de la Hermandad de los Dolores y de la Real Academia de Córdoba. A lo largo de la mañana han llegado más, como la enviada por la Fundación Princesa de Asturias y otra de la compañía cordobesa Teatro Par.

La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, ha destacado antes de firmar en el libro de condolencias que "se nos va un cordobés ejemplar, un poeta único, extraordinario, y sobre todo una buena persona". "Hoy Córdoba despide como se merece a este Hijo Predilecto, alguien que a través de su trayectoria fue capaz de lanzar esos puentes entre las distintas generaciones de poetas y también desde su crítica constructiva nos permitía tener una visión distinta de algunos aspectos que estaban ocurriendo en la actualidad", ha señalado.

El poeta José Luis Rey ha recordado que García Baena "ha sido maestro de varias generaciones, desde los Novísimos hasta nosotros, los del 2000" por eso "es un día muy triste en lo personal y en lo literario". "Al menos nos queda el consuelo de que deja una grandísima obra que está en el canon de la poesía española del siglo XX".

El escritor Alejandro López Andrada se ha mostrado "totalmente destrozado porque Pablo, además de un maestro de la poesía, era un padre ético y espiritual, un hombre de una ternura infinita y una gran humanidad que nos ha apoyado a todos los poetas andaluces". 

El rector de la Universidad de Córdoba, José Carlos Gómez Villamandos también ha pasado por la capilla ardiente, donde ha destacado que García Baena ha puesto "el nombre de Córdoba en los primeros puestos de la cultura" y ha agregado que para la institución que representa es "un inmenso honor el haberlo nombrado doctor honoris causa".

Por su parte, el director de la Real Academia de Córdoba, José Cosano, ha asegurado que "perdemos a una de las grandes figuras de la poesía contemporánea, no sólo a nivel de Córdoba, sino a nivel nacional e internacional". "Pablo ha significado la quintaesencia de lo que fue Cántico y gracias a él Cántico ha saltado del anonimato a la Historia de la Literatura", ha concluido.

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