Un cooperante francés ha sido asesinado "salvajemente" al este del Chad, anunció hoy el ministro galo de Exteriores, Bernard Kouchner. Se trata de Pascal Marlinge, que trabajaba para una organización humanitaria con los desplazados y refugiados en la localidad de Farchana, al este del país africano, indicó Kouchner en un comunicado, sin precisar el nombre de la organización.

Marlinge, de 49 años, murió tiroteado cuando viajaba con otros cooperantes en un convoy de tres coches, que fue detenido por un grupo de hombres armados, según las primeras informaciones obtenidas por la ONG británica Save the Children, para la que trabajaba.

Al denunciar este "acto de barbarie", el jefe de la diplomacia francesa pidió a las autoridades chadianas que esclarezcan lo ocurrido. Los restos mortales de la víctima serán trasladados hoy mismo a la capital del Chad, indicó Kouchner, al expresar sus condolencias a la familia, a la que el Ministerio de Exteriores dará "todo el apoyo necesario" en esta adversidad.

Según indicó Save The Children, el convoy de tres coches -uno con un chófer de la ONG y los otros dos de otra agencia humanitaria-, había salido de Farchana y se dirigía hacia Hajir Hadid, cerca de la frontera con Sudán. Hacia las 10.15 locales, un grupo de hombres armados detuvo el convoy, "hubo unos disparos", Marlinge murió, y los otros cuatro cooperantes salieron indemnes, indicó la ONG, al precisar que los detalles precisos están pendientes de confirmación. Save the Children, que ha enviado a un equipo al Chad para ayudar en la investigación, indica que ha suspendido su labor en el país africano hasta nueva orden.

Marlinge estaba casado y era padre de una adolescente, precisó la ONG, al señalar que los restos mortales del cooperante serán repatriados a Francia, donde vive su familia.