La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicitó ayer a la Sección Segunda de lo Penal la apertura de juicio oral para que siente en el banquillo a 40 dirigentes de la ilegalizada Batasuna por su sumisión a ETA. El Ministerio Público da así por concluida la instrucción del sumario 35/02, iniciada por el juez Baltasar Garzón en 2002.

Entre los 40 acusados se encuentra el ex portavoz del ilegalizado partido, Arnaldo Otegi y los dirigentes Joseba Permach, Joseba Álvarez o Rufino Etxeberría. Aunque también están procesados José Antonio Urrutikoetxea Bengoechea, Josu Ternera, y Jon Salaberría, éstos no serán juzgados en esta ocasión. El primero se encuentra en paradero desconocido mientras que el segundo está preso en Francia y no podrá ser enjuiciado hasta que las autoridades del país vecino le entreguen. Había un tercero, Juan Cruz Idigoras Guerricabeitia, pero su fallecimiento le exonera de cualquier responsabilidad.

Los 40 dirigentes de la ilegalizada formación están procesados por un delito de pertenencia la organización terrorista ETA, dentro del sumario en el que investiga la financiación de la banda terrorista a través de las herriko tabernas -controladas por Batasuna- y se enfrentan a peticiones de entre diez y catorce años de cárcel.

Según un auto de la Sala en octubre del pasado año en el que confirma los procesamientos, las conductas de los acusados podrían enmarcarse en los delitos de integración en organización terrorista o de participación a favor de la misma por la cooperación en actividades públicas o privadas "que pudieran tener por finalidad desarrollar la estrategia de atemorización social que guía a la banda terrorista ETA". Aseguraba que se trata de organizaciones y empresas que utilizan las posibilidades que les "brinda" el ordenamiento jurídico "para desarrollar sistemas de control social y de financiación bajo la superior relación y tutela de ETA".

Los procesamientos se llevaron a cabo en tres fases. En el primer auto, el 25 de enero de 2005, Garzón procesó a 36 dirigentes de Batasuna. Posteriormente, en febrero de ese mismo año, lo extendió a los ex parlamentarios de Sozialista Abertzaleak Joseba Álvarez, Joseba Permach y Josu Ternera. Por último, el 2 de junio de 2005, el juez Fernando Grande-Marlaska -que sustituía a su colega Baltasar Garzón, quien disfrutaba de una excedencia en Estados Unidos- procesó a Arnaldo Otegi y a Jon Salaberria.