El ministro de Economía marroquí, Salaheddine Mezouar, defendió ayer que "Ceuta y Melilla son marroquíes" si bien aseguró que su país, que considera a España un "amigo", no quiere "entrar en conflicto" por esta cuestión. "Es claro que para Marruecos Ceuta y Melilla son marroquíes" y "no hay que volver a la historia y la geografía" para constatarlo, afirmó el titular de Economía, insistiendo en que "la evidencia es la evidencia".

"Marruecos -añadió- no está dentro de un esquema de montar una presión ni de entrar en conflicto por esto". Según el ministro marroquí, se trata de un tema "muy sensible" para los dos países que va a resolver, a su juicio, "el tiempo" y al final "el buen sentido acabará ganando". En su intervención en el Fórum Europa, Salaheddine se mostró convencido de que "el futuro entre Marruecos y España será sin fronteras ni culturales, ni geográficas ni de otro tipo". "Esta es mi convicción y la de la clase política de Marruecos", agregó, considerando que esto podría ocurrir "dentro de 10 ó 20 años".

En todo caso, y puesto que Marruecos es un país "que está creciendo y se va a consolidar" y estará "al mismo nivel que los países europeos en el futuro", consideró que en el marco de la integración euromediterránea "este tipo de problemas va a ser de más fácil solución que lo que se viven hoy".

Si la reivindicación era obvia, no lo fue menos la respuesta de una de las partes implicadas. El Ejecutivo de la ciudad autónoma de Ceuta, en manos del PP, reiteró su convencimiento de que "ningún Gobierno español estará dispuesto a negociar con Marruecos la españolidad de Ceuta y Melilla", puesto que "supondría dudar de la integridad territorial de España, es decir, quebrantar un principio constitucional".

En otro orden de cosas, el titular de Economía marroquí defendió que "España y el español tienen que volver con fuerza porque hay una base y un interés" en Marruecos. Según el ministro, en su país un 25% de la población es hispanohablante pero "en los últimos 30 años España ha olvidado estos aspectos culturales y de idioma".

Preguntado por el futuro de la Unión del Magreb Arabe (UMA), Salaheddine, arremetió contra Argelia, a quien acusó de intentar debilitar a Marruecos y montar un "conflicto irreal" con respecto al Sáhara, ya que cree que con eso y el "petróleo va a ser el líder".