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Un resultado idéntico, pero otra sensación

Agotados. El partido fue de esos que empiezan y acaban con un chasquido y los ojos, atónitos, aún no tienen tiempo de captar tantas cosas. A pesar de tener que ver nada más que dos goles.

Y los jugadores, suele pasar en esas circunstancias, son los que más sufren por el estrés y el agotamiento físico y mental. Por eso, dos de los tres protagonistas ayer en la rueda de prensa lo fueron por sus problemas físicos. Y podían haber sido llamados más. Porque hasta cuatro profesionales acabaron tocados en mayor medida en el intensísimo encuentro frente al Elche.

El primero en tomar el micrófono en la sala de prensa fue un Asen serio, mucho más que en otras ocasiones. Posiblemente en su recuerdo pesase mucho más la última parábola que salió por encima del larguero que el gol que valió el empate final.

Así, el madrileño confesaba con cierta melancolía que "en esa última jugada vi la acción clara y fue una lástima que la pelota se me quedara un poco corta". Aún así, quizá como forma de consolarle, uno de los presentes le recordó que su tanto ayer sí que valió, lo que llevó al delantero a decir que esas fueron "las buenas sensaciones que se quedan. Eso y la actitud del equipo".

Porque en el plano colectivo, Asen también quiso subrayar lo positivo. Considera que el Córdoba "sobre todo en la segunda mitad tuvo mucho ímpetu, puso muchas ganas...". Por eso, el empate tiene asociadas "otras sensaciones, ha sido un encuentro diferente por todo a los anteriores".

El Elche no le pareció a Asen el mejor de los rivales que ha tenido delante en lo que va de año, pero sí "uno de los mejores y defensivamente puede que sí que fuera el más completo".

Pierini tuvo que ser sustituido y, con ello, perdió su condición de omnipresente en todos los minutos. El central, no obstante, desmintió que sus molestias físicas fueran graves comentando que, simplemente, se le habían "subido los gemelos, pero ya estoy bien". Sobre el resultado, el transalpino coincidía con que "las sensaciones son distintas porque hemos empezado perdiendo".

Como algo positivo valoraba el capitán la adaptibilidad mostrada por sus compañeros, "porque nos amoldamos bien al cambio de sistema cuando pasamos a jugar con tres defensas y al final nos dio sus frutos". En todo caso, el italiano prefiere quedarse "con las sensaciones de este último partido" antes que con el dato de que el Córdoba lleva 2 puntos de 12, porque "eso es ya pasado y hay que pensar en el Xerez".

Diego Reyes fue el último en desfilar. El gaditano confesó poco después que su demora se debió a que había pasado por el jacuzzi porque tenía el isquiotibial "un poco tieso". También en el abductor tuvo problemas durante el choque el lateral, que explicó la jugada en la que se rompió diciendo que fue "una ocasión de ellos en la que, al tratar de tapar un centro, se me subió el músculo".

En lo referente al choque, la sensación que se le queda a Diego Reyes es "agridulce" porque "a pesar de que jugamos ante un buen rival" fue únicamente "un error" el que les costó tener que remontar el choque. Importante flaqueza, porque para el zurdo "las jugadas a balón parado son decisivas en una categoría como la Segunda División".

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