Se acaban las vacaciones para la plantilla blanquiverde. Después de siete días de descanso, los jugadores están citados esta mañana a las 9.30 -aunque tienen instrucciones de estar en Córdoba desde ayer para evitar posibles retrasos- para reanudar los entrenamientos ya con la mente puesta en el próximo duelo, que les medirá el 6 de enero (12.00) en El Arcángel al Sporting de Gijón.

Paco Jémez ha dispuesto una doble sesión en la vuelta al tajo, mientras que mañana sólo habrá entrenamiento de tarde. En principio, el técnico había previsto una nueva jornada de trabajo para el primer día del año, aunque finalmente hubo un cambio de planes y dejó en suspenso la celebración de ese entrenamiento dependiendo de la actitud que observe en el grupo.

Serán sesiones con una alta carga física para recuperar el ritmo de competición después de una semana de asueto. Aunque los jugadores se llevaron un plan de preparación específico para mantener el tono durante las vacaciones, Esaú Sánchez tomará el protagonismo en las primeras jornadas para que la plantilla vuelva cuanto antes a su mejor forma. Además, antes de saltar al césped tocará pasar por la báscula para comprobar que las fiestas no han tenido efectos en el peso.

El calendario exigirá una inmediata puesta a punto en un equipo que antes del parón acumuló siete jornadas sin ganar, una racha que ha llevado al Córdoba a la zona media de la tabla a sólo cinco puntos de los puestos de descenso. La serie es especialmente preocupante en casa, donde el Córdoba sólo ha ganado dos de sus nueve citas -la última, ante el Castellón hace dos meses-, un dato preocupante ante la visita del Sporting, tercer clasificado con 31 puntos que marca la frontera de los puestos de ascenso.

Durante estas sesiones, Paco Jémez tendrá que buscar soluciones a corto plazo a problemas como la baja de Dani en el lateral derecho, que obligará a reestructurar la defensa ante los asturianos.

Además, la vuelta al tajo coincidirá con los movimientos de la apertura en el mercado invernal, con las puertas abiertas tanto a posibles entradas como salidas. El club pretende cubrir la ficha que se dejó libre en pretemporada, además de incorporar otro jugador para cubrir la delantera y el lateral derecho, una operación llegada que facilitaría la salida de algún jugador sin oportunidades.