"Vamos a ir a una plantilla de 22, en una primera fase de aquí a diciembre". Hasta el lunes, cuando el club dio a conocer la situación de la plantilla, esto era lo único que se sabía a ciencia cierta del nuevo proyecto del Córdoba. Lo había dicho Javier Zubillaga tras departir con Lucas Alcaraz, momentos después de la presentación del granadino como técnico blanquiverde. Ahora ya hay una cosa más que clara: el director deportivo tendrá que hacer al menos una decena de incorporaciones durante el verano. Y muchas de ellas tendrán que llegar en las próximas semanas, pues el equipo apenas cuenta actualmente con nueve jugadores y el inicio de la pretemporada está previsto para el próximo 20 de julio. De momento, la prioridad del riojano es cerrar la continuidad de Pierini y Fernando López, los dos únicos a los que se les ofrecerá la renovación de sus contratos. Con ambos ya ha habido los primeros contactos y en los próximos días se cerrará el trato, pues ni uno ni otro pondrán muchos problemas en el aspecto económico. Una vez culminado este proceso, y mientras empiezan a caer fichajes, tocará el turno de negociar con Yordi, Ito, Cristian Álvarez y Mario, los cuatro con contrato en vigor, pero a los que el club busca una salida; ninguno pondrá fácil las cosas, aunque en la entidad confían en la experiencia de Zubillaga en este tipo de negociaciones para alcanzar el mejor acuerdo posible.

El plan 09-10 del CCF ha dejado al descubierto nueve de las once demarcaciones del equipo. Sólo la portería y el extremo izquierdo están ya cerradas. Raúl Navas y Fernando López serán los cancerberos con los que contará Alcaraz, quedando la titularidad en manos del gaditano. Más competencia se espera en el flanco siniestro del ataque, donde Arteaga y José Vega lucharán por una plaza, con ventaja inicial para el sevillano. En el resto de puestos habrá caras nuevas cuando el balón vuelva a rodar el próximo 30 de agosto. Y en casi todas habrá dos, pues el proyecto a 22 futbolistas impedirá que se doblen todas las posiciones, algo que ya ocurrió la pasada temporada en el lateral zurdo, donde, hasta enero, Rubén Párraga quedó como el único inquilino.

En la defensa sólo continuarán Ceballos, Gaspar y Pierini, cuyo deseo de culminar su carrera como futbolista en el Córdoba pesará más que cualquier oferta a la baja que le presente el club. De este modo, en El Arcángel aterrizarán un par de centrales más y, al menos, un lateral zurdo, pues las salidas de Rubén y Javi Casas han dejado huérfana esa zona. Dependiendo de la polivalencia de los zagueros y las posibilidades del mercado, llegará otro lateral.

En el centro del campo, toda la confianza, de momento, recae en Santi Carpintero, un hombre que ya ha demostrado que con regularidad -algo que no tuvo durante el último campeonato- tiene calidad y mando de sobra. A la espera de conocer cómo ve Lucas a Javi Flores -los vaivenes entre el doble pivote y la mediapunta no le han beneficiado en nada- y concretar la salida de Ito, el Córdoba necesita al menos tres centrocampistas más. Se busca uno con un perfil de organizador y otros más físicos y con buen juego aéreo.

El extremo derecho es la otra demarcación que ha quedado desierta tras la salida de Guzmán y Oberman, y la puesta en el mercado de Cristian Álvarez. Las posibilidades que da sobre todo Arteaga -ha jugado muchas veces a banda cambiado con éxito-, Ceballos o el propio Pepe Díaz pueden hacer que sólo desembarque un jugador para atacar por la derecha.

Y en el ataque, más dudas. Yordi tiene pie y medio fuera a la espera de la negociación de ruptura de su contrato, por lo que apenas quedan Asen y el futbolista de Almodóvar como referentes ofensivos. Por tanto, el proyecto de Zubillaga y Alcaraz necesita un par de atacantes más. Dado que el entrenador granadino es amigo de la velocidad en las zonas de vanguardia, el perfil a buscar será éste, aunque también podría llegar algún punta tipo tanque.