La selección española pasó con nota su primer examen serio antes de los Juegos y derrotó a la selección rusa, el coco de España en el Eurobásket, por 35 puntos de diferencia, en el último partido del Torneo de Extremadura. El encuentro, que enfrentó a los vigentes campeones de Europa (Rusia) frente al mundial (España), sirvió para reeditar la final del Eurobásket 2007 -en la que el equipo hispano se llevó la plata-, no defraudó a nadie y resultó ser muy emocionante, ya que los dos equipos se emplearon a fondo para preparar la cita olímpica.

Los chicos de Aíto, que afrontaron su primera prueba de fuego antes de China, tenían unas ganas tremendas de vengarse de Kirilenko y los suyos por lo sucedido en el Europeo de Madrid, y lo consiguieron. Los españoles se sintieron muy cómodos en la cancha cacereña y, por eso, el seleccionador nacional no dudó en dar los primeros minutos de juego al pívot Pau Gasol (16 puntos y 5 rebotes), que anotó cuatro puntos y capturó dos rechaces durante el tiempo que jugó en el primer cuarto.

España subió el ritmo del partido y amplió la ventaja hasta los siete puntos (13-6), pero Rusia aguantó el chaparrón español y se puso a tan sólo cuatro (17-13), merced a la buena actuación del capitán Kirilenko (18 puntos y 10 rebotes), que se convirtió en el amo de la zona y capturó un total de seis rebotes durante el primer periodo.

El segundo cuarto comenzó con un guión muy parecido al primero. Aíto no dejó de mover el banquillo y de cambiar jugadores para mantener el ritmo constante en ataque y en defensa, consiguiendo España una ventaja de 17 puntos (30-13). Rusia, que estuvo casi cinco minutos sin anotar una sola canasta en el segundo periodo, logró zafarse de la buena presión defensiva española y volvió a encestar por mediación de Savrasenko, que puso el 53-23 en el marcador.

En la reanudación, España salió más relajada, lo que fue aprovechado por Rusia para anotar una serie de canastas y reducir la ventaja. La selección cerró el tercer cuarto con una diferencia de 27 puntos (73-46). Ya en el último cuarto, con los hermanos Gasol juntos en pista, se dominó la pintura y amplió la ventaja española. Rusia bajó los brazos y los de Aíto lo aprovecharon para machacar al combinado ruso.