El empate conseguido ante el Ceuta (1-1) en la última jornada ha dejado un regusto amargo en el seno del Lucena. Visto lo visto sobre el terreno de juego, el punto sólo puede considerarse como bueno porque el conjunto de Antonio Montero apenas creó peligro y en la segunda mitad estuvo a merced del cuadro norteafricano. Pero lo peor no es eso, sino el parte de bajas con el que el bando provenzal llegará a la próxima cita ante un Linares que ha dejado apartada su crisis con un triunfo incontestable (0-2) en Talavera de la Reina.

José María Belfortti, el indiscutible capitán de la retaguardia aracelitana, se perderá su primer partido de la temporada al ver ante el Ceuta la quinta amarilla de su primer ciclo de tarjetas. Por idéntico motivo tampoco estará en Linarejos Rafa Berenguer, el que se perfilaba como recambio del ex del Melilla hasta que la lesión de Adriano obligó a Nene a darle entrada en el campo el tiempo justo para que Pardo Martínez le amonestara.

Pero no todo es desolador en el horizonte del Lucena. Juanlu, ausente contra el Melilla por cumplir con Competición, regresará al once para actuar en el eje de la defensa. Además, Adriano se apuntó a la cita ante el Linares ayer mismo pese a que aún arrastraba los problemas físicos en el gemelo que le obligaron a pedir el cambio. El burgalés indicó que "para jugar en Linares no voy a tener problemas. Sé que nos vamos a medir a un equipo muy físico y quiero estar porque somos dos equipos de los que estamos arriba en la clasificación. Evidentemente, creo que va a ser un partido en el que si sabemos aprovechar los espacios tendremos mucho camino ganado".

cambio de planes

El adelanto a la tarde del sábado (Linarejos, 17.00) del compromiso liguero ante el Linares ha obligado a Antonio Montero ha variar el plan habitual de entrenamientos. La plantilla provenzal disfrutó ayer de su tradicional jornada de descanso y hoy volverá a los entrenamientos para preparar ya el duelo ante uno de los más serios candidatos a pelear por el ascenso.

empieza a despertar

El Linares consiguió la primera victoria fuera de casa después de dos meses ante el Talavera, ya que el último precedente fue el 7 de octubre al derrotar al Baza (1-2). El resultado fue, además, el mejor regalo para el técnico, Pedro Pablo Braojos, que vivía sus peores días en un banquillo en el que cumplió 100 partidos. Esta victoria sirive al conjunto azulillo para frenar la sangría de resultados que le había hecho salir de la zona de play off tras sumar sólo seis de los últimos 24 puntos.