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El filial revive el 'cartagenazo'

  • Los de Losada se sobreponen al tanto inicial de los locales para conseguir un triunfo de mucho mérito en el feudo del líder

  • Quiles y Pablo Vázquez firmaron los tantos de la victoria

Pablo Vázquez celebra con sus compañeros el tanto de la victoria blanquiverde en Cartagena.

Pablo Vázquez celebra con sus compañeros el tanto de la victoria blanquiverde en Cartagena. / pablo sánchez / la verdad

Cartagonova es un feudo que se mantiene en la historia del cordobesismo desde que un 30 de junio de 1999 el primer equipo blanquiverde consiguiera un histórico e inesperado ascenso a Segunda División, después de 17 años en la categoría de bronce. Aquella travesía por el desierto acabó cuando Óscar Ventaja clavó en la escuadra de la portería del Cartagena un potente disparo de falta. Salvando las distancias, el Córdoba B logró ayer una de esas victorias que marcan una temporada y lo hizo de nuevo en Cartagonova, un campo que definitivamente es fetiche para los blanquiverdes. De la manera más inesperada, con un equipo plagado de bajas (dos juveniles fueron titulares ayer en la medular) y ante el sólido líder de la categoría, el conjunto de Carlos Losada sumó tres puntos trascendentales que le sirven para evitar su caída a la zona de descenso, en una jornada en la que muchos rivales directos apretaron el paso por abajo. Un auténtico balón de oxígeno que sirve al filial para recuperar confianza después de tres derrotas consecutivas y que confirma la eficacia del cuadro entrenado por Losada cuando actúa lejos de su estadio.

Las bajas marcaron la alineación de Carlos Losada, que tuvo que tirar de dos juveniles (Alberto García y Borja Estepa) para componer su centro del campo. Las ausencias las suplieron los blanquiverdes con un choque serio y en el que derrocharon coraje, orgullo e intensidad, aunque para ello necesitaron verse por debajo en el marcador.

Porque hasta que Arturo inauguró el marcador en el minuto 11 tras un gran pase de Sergio Jiménez, el conjunto entrenado por Carlos Losada no despertó. A partir de entonces, los jóvenes cordobesistas serenaron su fútbol y empezaron a dominar más el balón, auténtica arma bajo la que construyen su mejor juego. El conjunto local se relajó en exceso y aunque la reacción del filial no fue inmediata, poco a poco los pupilos de Losada fueron ganando terreno y rondando la meta de Limones, con Moha Traoré -escorado en banda derecha- como futbolista más incisivo.

Pasada la media hora de juego, el dominio paulatino que el filial fue consiguiendo se materializó en el empate. El contragolpe que culminó Quiles con un zurdazo cruzado imposible para Limones lo inició Alberto García con un robo providencial a Chus Hevia y un gran pase en largo que el punta onubense hizo bueno. Lo merecía el filial y el tanto dejó helada a la afición local, que empezó a darse cuenta del atasco que sufría su equipo y de que no iba a ser nada fácil revertir la situación para acabar remontando el partido. Con equilibrio en el marcador y el filial más asentado y paciente se llegó al descanso.

Tras la reanudación fue el Cartagena el primero en intentarlo, mediante una jugada de Arturo, que controló un buen pase de Moisés pero no pudo salvar la salida de Valera. También pudo anotar al poco de entrar en el campo Sergio García, pero su zurdazo se marchó por encima del larguero. El equipo de Alberto Monteagudo perdonó cuando pudo adelantarse y acabó por pagarlo caro, porque el Córdoba B no dejó pasar su oportunidad y se adelantó gracias a un soberbio testarazo de Pablo Vázquez a la salida de un córner, en el que ganó a toda la zaga blanquinegra para batir a Limones.

Quedaban apenas diez minutos cuando los cordobesistas lograron poner el marcador a su favor y tocaba sufrir para defender un triunfo tan importante como inesperado. Monteagudo tiró de Isi Ros y los cartageneros mejoraron algo en el tramo final, pero tampoco llegaron a inquietar demasiado a Valera. El filial supo defenderse de manera ordenada y firme hasta el pitido final del árbitro para completar la machada, dejar tocado al líder y llevarse tres puntos de oro del Cartagonova que significan mucho para la moral del equipo. Cartagena sigue ocupando lugar preferente en el imaginario blanquiverde.

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