Rafa Nadal sesgó de raíz los comentarios de tener una posible lesión grave de rodilla y lo demostró derrotando claramente a su paisano Carlos Moyá, por 6-3 y 6-4, llevándose, de este modo, por segundo año consecutivo el Málaga Másters de Tenis Banesto disputado en el pabellón José María Martín Carpena de Málaga.

El manacorí comenzó con un ritmo muy fuerte y dispuesto a acabar pronto con Carlos Moyá, haciéndose, de esta forma, con los dos primeros juegos.

No obstante, Carlos Moyá comenzó a reponerse y por minutos fue igualando el juego a Nadal, pero éste tuvo una gran reacción y puso, nuevamente, la directa en el marcador (2-4).

El tenista manacorí llevaba la voz cantante y en numerosas ocasiones recurrió a su poderoso revés para desarbolar a un Carlos Moyá que no tenía unos de sus mejores días. De este modo, Nadal acabo llevándose el primet set por 6-3 de forma plácida.

En el segundo set, se esperaba más de Moyá. Y llegó. El balear no estaba por la labor de que el partido se disputara por la vía rápida y trató de ponerle las cosas difíciles a Nadal, consiguiendo el primer juego de esta manga.

Sin embargo la reacción de Moyá resultó ser un espejismo porque Nadal se convirtió en un vendaval en el resto del partido y, con algún que otro altibajo, acabó paseándose por la cancha del Martín Carpena. Para hacerse, finalmente, con el torneo por segunda vez al ganar de forma merecida a un desganado Carlos Moyá que no dio muestras de creer en sus posibilidades.

Nadal jugó la final del Másters al derrotar el sábado al toledano Feliciano López por 7-6 y 6-3, y Moyá hizo lo mismo con el alicantino David Ferrer por 6-4 y 6-4.