Llegó su momento. Tras un titubeante inicio de campeonato, el Prasa viaja a Alcobendas (Municipal Severo Ochoa, 18.00) en el mejor momento de forma de campeonato. Desde finales de Octubre, el Prasa no conoce la derrota. Desde aquel traspiés ante el Ciudad Encantada, han pasado ya cinco jornadas donde los prasistas han vencido en cuatro encuentros y tan sólo han cedido un empate ante el Forcusa Huesca.

La presa de esta semana se antoja muy complicada ya que enfrenten tendrán al poderoso Alcobendas. Los madrileños vienen de vencer al Ars en la última jornada pero su anterior compromiso en casa lo saldó con derrota. Esto lo puede aprovechar el conjunto vallesano ya que, si con el paso de los minutos, el envite se encuentra nivelado, la presión le puede jugar una mala pasada a los locales. Además una derrota ante los de Paco Castillo los acercaría considerablemente en la clasificación.

No obstante, el Prasa viaja tocado en cuanto a las lesiones se refiere. Los vallesanos no podrán contar con Nacho Serrano y a él, y hasta última hora, se contará con las dudas de tres jugadores de inicio en los planes del preparador cordobés. De este modo, Gerard Espigol, Edu Escobedo y Manolo Vilches siguen con las molestias que vienen arrastrando en las últimas jornadas. Aún así, forzarán la máquina en caso de que sea necesario.

El entrenador tarugo comentó que "aún con las bajas vamos a intentarlo por todos los medios ya que vencer en Alcobendas supondría ganar mucho, sería un gran resultado". Además, señaló que "perder tampoco sería salirnos de liga, quedaría mucha liga", debido a que "igual que hemos perdido puntos también los pueden perder otros más adelante como el propio Alcobendas o Barakaldo". Lo dicho, alea jacta est, o lo que es lo mismo, la suerte está echada. Un triunfo traería la ilusión del ascenso por Pozoblanco.