Expectante tras el sólido inicio de los Lakers, sólo manchado por un par de derrotas en la última semana, y esperanzado por su buen momento de juego, Pau Gasol vivió esta madrugada ante los Celtics la reedición de la final de la pasada campaña y todo un test para la actitud de su equipo. "Es el momento de reivindicarnos", aseguró Gasol, que tras los primeros meses de competición está readaptando su rol.

El español ha recuperado la posición de 4, a la que estaba acostumbrado antes de llegar a la NBA. "Practico bastante ese tiro de cinco metros, ahora juego más por fuera y aprovecho que las defensas se suelen meter mucho en la zona", explicó Gasol, que no olvida la sensación de frustración que invadió al vestuario angelino en el mes de junio pasado, cuando Boston logró su decimoséptimo anillo. "Es una incógnita", dijo Gasol acerca de si los Lakers tienen más opciones de ganar el título. "No sabemos cómo se va a desarrollar la temporada, faltan muchos partidos y muchas batallas que librar", dijo.

"Ha sido un muy buen año, por el traspaso y el cambio de situación. Ahora estoy en un equipazo", rememoró el máximo reboteador (9,1 por partido) y el segundo máximo anotador (17,5 por partido) de los Lakers esta temporada.

"Llegamos a la Final, aunque no pudimos ganarla, y luego logré una medalla de plata en Pekín, que es algo que no ocurre todos los años", concluyó el jugador.