El nuevo proyecto del Córdoba se presentará en El Arcángel ante el Getafe, si no hay cambios de última hora. La idea era traer a un conjunto de Primera División y, tras la negativa del Sevilla -era la primera opción del club, desvanecida por la clasificación para la Champions del conjunto nervionense-, al final el elegido ha sido el equipo madrileño. A pesar de que el tirón mediático puede ser menor, los recuerdos de aquella agónica salvación de la temporada 2002-03 en el Coliseum Alfonso Pérez, la presencia en el banquillo del ex madridista Míchel y el buen nivel de juego de la escuadra azulona en los últimos años son atractivos más que suficientes para la puesta de largo oficial del cuadro de Lucas Alcaraz.

Este partido será el epílogo a un verano en el que el CCF disputará un total de cinco o seis encuentros de preparación, según deseo del nuevo técnico blanquiverde. El calendario oficial de fechas y rivales todavía no está cerrado y no se conocerá hasta los próximos días, una vez que la dirección deportiva reciba el visto bueno de esos equipos. Entre ellos podrían estar el Lucena y el Pozoblanco.

El Córdoba ya dejó claro hace unas semanas que quería dar continuidad a la idea recuperada la pasada temporada de hacer un partido de presentación ante su afición antes del inicio del campeonato, previsto para el 30 de agosto. Si la campaña pasada el rival fue el Recreativo -este año nuevo compañero de fatigas en la Liga Adelante-, con el que las relaciones son magníficas tanto a nivel institucional como a nivel de hinchada, para esta edición el elegido ha sido el Getafe.

El equipo madrileño se ganó el cariño de toda la afición española hace unas campañas con su gran temporada en la Copa de la UEFA y su atractiva apuesta de juego. Ahora, de la mano de Míchel y con otros buenos jugadores salidos de la cantera del Real Madrid como Soldado o Granero, el club que preside Ángel Torres quiere seguir consolidándose en la elite, lejos de aquellas batallas que protagonizó con rivales como el Córdoba hace tan solo unos años en la categoría de plata.

Sin ir más lejos, el Córdoba se jugó el ser o no ser en la competición en feudo getafense en la última jornada del curso 2002-03. El equipo entonces entrenado por Fernando Castro Santos necesitaba sumar al menos un punto en el Coliseum Alfonso Pérez para conservar su plaza en la categoría. Y empató (1-1) gracias a un tanto del argentino Ariel Montenegro.

5-6