Rafa Muñoz encara una despedida de año frenética por la alta competición. El cordobés es uno de los once nadadores que integran la expedición española que pone rumbo el lunes a la ciudad húngara de Debrecen, sede del 13 al 16 diciembre del Campeonato de Europa de piscina corta. A su conclusión, la siguiente escala para el del Navial será Gijón y el Nacional sobre piscina de 50 metros.

En ambas citas, Rafa Muñoz empieza a jugarse su presencia en los Juegos Olímpicos de Pekín, su ambicioso reto para la nueva temporada. Y para alcanzar ese destino, sólo una vía. El mariposista está obligado a rebajar los 52.66 segundos en los que la FEN cifró el billete para los 100 metros en su especialidad.

El plan diseñado por el entorno del cordobés contempla varias escalas. "Voy al Europeo con mentalidad de hacer final en los 50 metros y de mejorar mi marca personal en los 100 metros", reconoció Muñoz. En cuanto al segundo de sus objetivos, todo pasa por bajar de 53.35, registro que le aupó a ser campeón de España de verano en julio en Barcelona.

Si el guión de Rafa Muñoz cumple con los pronósticos, el siguiente paso será atacar la mínima para las Olimpiadas. Como escenario, el nadador ha elegido el Campeonato de España de invierno que se celebra en Asturias del 19 al 22 de este mes, aunque de poco le servirá en caso de conseguirlo, porque los billetes para Pekín sólo se podrán adquirir desde el 1 de enero.

A partir de ahí, el deportista afincado en Barcelona incrementará su nivel en cada prueba con el Campeonato de Europa de Eindhoven de marzo como referencia. Desde enero estará, de nuevo, bajo la dirección técnica de Joan Fortuni, una vez recuperado de su enfermedad.