Una hora y un minuto. Eso tardó Marcel Granollers en finiquitar (6-1 y 6-1) su esperado partido ante Fernando Vicente en los octavos de final de los Campeonatos Internacionales de Andalucía en Pista Rápida Ciudad de Pozoblanco Open Diputación. Era el partido más esperado y defraudó a la mayoría. No porque no quisieran que ganara Granollers, que era el preferido del público, sino porque esperaban más oposición de alguien como Vicente, a quien se le suele dar bastante bien este torneo y ha ofrecido habitualmente un gran espectáculo.

Primera bola de partido, corto intercambio y Marcel cerrando el punto en la red. Sólo era el primero, pero fue sintomático de cómo iba a ser el partido. Había dos en la pista, pero uno quería jugar y el otro impedir lo inevitable, que le pasaran por encima. Granollers se sabía favorito y no dio opción a la especulación que tanto podría haberle complicado ante un jugador tan veterano y con tantos recursos como el castellonense. Fue al ataque desde el inicio, presionó todos los servicios de Vicente, se fue a la red cada vez que su oponente intentaba controlar los intercambios con sus habituales golpes liftados, le rompió el saque en el primer juego, aguantó a el suyo como pudo (esta vez no estuvo tan acertado como en partidos anteriores y sólo conectó un 46% de primeros) y quebró la confianza de su adversario. Total 6-1.

Y si el primer set no tuvo historia, el segundo fue un calco. Hubo dos diferencias: la primera, que Vicente consiguió su juego en el sexto juego del set, y no en el quinto como lo había hecho en la manga anterior; la segunda, que el castellonense pareció jugársela a una carta en el primer juego de este segundo set, el más largo del partido, que se llevó finalmente Granollers y, con él, el choque. Otro 6-1 para redondear la cuenta.

Marco Chiudinelli, previamente, se convertía en el primero que lograba su pase para cuartos de final por la parte alta del cuadro. Su rival, el belga Bemelmans no parecía, a priori, el enemigo ideal para encontrárselo a estas alturas del torneo. De características parecidas, con un buen primer servicio, rápido y una derecha muy potente, el partido fue igualado de inicio, y muy desequilibrado conforme pasaban los juegos.