El estadounidense Stewart Cink se coronó campeón del Abierto Británico al vencer en un desempate de cuatro hoyos extras a su compatriota Tom Watson, quien de esta manera se quedó en los umbrales de convertirse a sus 59 años en el golfista más veterano en ganar un major en toda la historia.

Ambos jugadores terminaron la cuarta ronda en el Alisa Course de Turnberry (Escocia) igualados en dos bajo par, pero Cink, número 33 del ranking mundial, prevaleció con claridad en el play off para adueñarse del primer major de su carrera, en la edición 138 del Open Británico, el torneo más tradicional e importante del mundo.

Watson, que cumplirá 60 años dentro de poco más de un mes y habitualmente se desempeña en el circuito senior, había sido la gran sorpresa de un torneo que ya había ganado en cinco oportunidades en el pasado, y comenzó ayer la cuarta ronda ubicado en soledad en la cima de la clasificación.

Pero una irregular jornada de 72 golpes, dos sobre par, lo obligó a jugar el desempate con Cink, que hizo 69 para ganarse ese derecho.

"Jugar en esta cancha y contra Watson... crecí pensando que quizá podría seguir el camino de Watson, por eso estoy feliz no sólo por haber ganado, sino por haber sido parte de todo esto", señaló radiante de felicidad Cink tras su gran victoria.