El Albacete despidió el año derrotando al Castellón, el equipo más flojo de cuantos han pasado por el Carlos Belmonte en lo que va de temporada, gracias a los goles de Calandria y Barkero. El Castellón demostró en Albacete por qué han surgido los nervios en un equipo situado en mitad de la tabla. Y lo demostraron con uno de los espectáculos más pobres que se han podido ver en el Carlos Belmonte. Ni una sola jugada de peligro en toda la primera parte dice muy a las claras donde está el problema de Moré.

Los de Quique Hernández pillaron en varias ocasiones a los castellonenses al contragolpe. En uno de ellos llegó el gol de Calandria. Un gran pase interior de Barkero fue aprovechado por el delantero argentino para, escorado, plantarse solo ante Oliva al que le batió colando al balón entre las piernas. Los manchegos pudieron sentenciar el partido en sendos contragolpes en los Xavi Jiménez no estuvo afortunado.

La única acción a reseñar por parte de los castellonenses llegó a los sesenta y dos minutos en un remate de Mora que dio en la parte superior del larguero de la portería albaceteña. Eso y nada más en el capítulo ofensivo de los de Moré. A los ochenta y ocho minutos, el colegiado señaló penalti en contra del Castellón, por un derribo dentro del área sobre Calandria. Barkero se encargó de lanzarlo, parándolo en primera instancia Oliva, el balón volvió a llegar a pies del futbolista albaceteño, que desde el suelo marcó el segundo gol de los manchegos.