cd Tenerife | córdoba cf

Como si la vida fuera carnaval

  • El Córdoba necesita sumar los tres puntos ante un rival también con necesidades y con el revulsivo del cambio de técnico

  • Romero hará pocos cambios respecto al domingo pasado

En medio de un ambiente festivo aterrizó ayer el Córdoba en Santa Cruz de Tenerife, que estos días vive agitada por la celebración de los carnavales, una fiesta siempre marcada en rojo en Tenerife, que pasa por ser una de las grandes cunas de esta fiesta en el territorio español. Sin embargo, las máscaras, las pelucas y las murgas no esconden la trascendencia de un partido en el que ambos equipos ponen mucho en juego, aunque a necesidad nadie gana a un Córdoba que todavía ve la zona de permanencia a diez puntos de distancia y que si quiere alimentar sus esperanzas de salvación necesita sumar de tres en tres, sin mirar rival ni feudo. Enfrente, el cuadro blanquiverde tendrá a un Tenerife que también llega con su particular dosis de agobio a este encuentro. De hecho, los insulares cambiaron de entrenador tras encadenar tres derrotas y un empate en sus últimos cuatro encuentros y han confiado en la figura de Joseba Etxeberría sus anhelos de reaccionar antes de verse plenamente inmersos en la zona peligrosa de la tabla.

El cuadro que dirige Jorge Romero viajó hasta tierras canarias con las sensaciones divididas entre el optimismo por la progresión del grupo tras una semana más de trabajo para los diez fichajes llegados al final del mercado invernal y la tensión que genera el hecho de saberse obligados a sumar, cuanto menos, un punto, que bien deberían ser los tres si es que los jugadores cordobesistas quieren asegurarse de que la directiva no vuelve a agitar el vestuario con un cambio de técnico. Y es que el trabajo de Jorge Romero se antoja a la luz de cualquiera como muy satisfactorio, pero como ya dejó caer Luis Oliver a principios de la semana, los resultados son los que mandan en esta profesión tan ingrata del fútbol y tras dos derrotas consecutivas un tercer revés podría resultar mortal para el preparador cordobés. La presencia de Caparrós el pasado domingo en El Arcángel disparó los rumores, aunque Romero aún mantiene el crédito que le otorgan sus futbolistas y las buenas sensaciones que el equipo transmitió ante el Barcelona B, en la primera puesta en escena tras la gran remodelación de los últimos días del mes de enero.

Pese al ambiente festivo que rodeará la celebración del encuentro, las estadísticas hablan de un choque tenso, en el que se miden uno de los peores equipos -el vigésimo- en las primeras partes, como es el Tenerife, y el peor visitante de la categoría, un Córdoba que quiere aprovechar ese disfraz de cordero degollado para dar un zarpazo que cambie de manera radical su errático rumbo en esta temporada. Por cierto que bien haría el cuadro cordobesista en exprimir los primeros 45 minutos, pues los datos señalan al Tenerife como el equipo más efectivo en las segundas partes de los encuentros.

Además de ese factor, Jorge Romero tendrá que saber lidiar con las sorpresas que pueda plantear Joseba Etxeberría, que se estrena en el banquillo canario con algunas incógnitas pero con la idea clara de que su equipo será intenso y correoso como base para un posterior crecimiento. Quizás por contar con pocos argumentos sólidos a los que agarrarse, Romero ya avisó en la previa de que ha sido la semana en la que más ha centrado sus esfuerzos en su equipo, dejando de lado ciertos análisis del rival que pueden saltar por los aires con el estreno de su entrenador.

Quizás por ese sentimiento de progreso que el técnico cordobés observó en su equipo durante la semana se esperan pocos cambios en el once inicial que salte al Heliodoro Rodríguez López. Fernández puede volver a ocupar el lateral derecho en detrimento de Caro y Álex Vallejo parte con cierta ventaja ante Álvaro Aguado en la pelea por suplir al sancionado Edu Ramos. Los demás deberían ser los mismos jugadores que se enfrentaron al Barcelona B.

Tratando de templar los nervios por la complicada situación que atraviesa, el Córdoba buscará un triunfo para disfrazar sus urgencias y volver a creer. Como si no le fuera la vida en ello, como si la vida sólo fuera carnaval.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios