Sin Antoñito, sancionado, ni los lesionados Caballero y Piovaccari -Cisma queda al margen, pues no jugará hasta 2018-, Luis Carrión mantuvo su ritual para los partidos en casa y citó a todos los jugadores del primer plantel disponibles, a los que en esta ocasión sumó al habitual Javi Galán, y los atacantes del filial Quiles y Moha.

La presencia del maliense es, por tanto, la nota más llamativa de la preconvocatoria después de que la pasada semana fuera expulsado de un entrenamiento, un caso aislado que como ha quedado ahora demostrado el técnico ha sabido tratar de la manera más beneficiosa para el equipo. Su castigo se quedó en ayudar al B en el último partido en casa ante el Mérida.

Eso sí, con esta amplia nómina de futbolistas, Carrión tendrá que hacer cuatro descartes hoy poco antes del inicio del partido. Se da por segura la presencia en esta lista de Samu de los Reyes, que sigue sin entrar en los planes del técnico desde que en enero le comunicara que pasaba a ser su última opción para el lateral izquierdo. Es más, incluso Bergdich jugó en Valladolid antes que él ante las bajas de Cisma y Bíttolo. Junto al sevillano, Bijimine y Guille Donoso han pasado a ser dos clásicos, aunque la última palabra la tiene el técnico.