El Consejo del Movimiento Ciudadano de Córdoba ha valorado "muy positivamente" que el Ayuntamiento le haya consultado "por primera vez al movimiento ciudadano" antes de autorizar la instalación de puestos de caracoles con veladores en la vía pública. "Dicha consulta ha propiciado que se dejarán de instalar, se trasladaran o se le pusieran condiciones a cinco puestos de las cuatro decenas que querían instalarse en distintos barrios de la ciudad", sentenció el presidente del CMC, Juan Andrés de Gracia. "De esa forma, se han evitado alteraciones de la convivencia, un mejor uso de la vía pública y ha propiciado que podamos disfrutar de dichos puestos con todos los parabienes", sentenció.

De Gracia resaltó que "el movimiento ciudadano es absolutamente favorable a la instalación de estos puestos que forman parte de la idiosincrasia cordobesa", pero defiende que, "una vez se han transformado en verdaderos bares ambulantes, tiene que regularse su ubicación con más cuidado, especialmente en lo que se refiere a la instalación de carpas, toldajes y la instalación de veladores". "No tiene sentido que se busque regular a los negocios hosteleros que se ubican en locales durante todo el año y que no se haga con los que ocupan la vía pública, aunque sea temporalmente", añadió.

De Gracia adelantó que exigirán que se consulte a los consejos de distrito para la cruces de 2018

Para el Consejo del Movimiento Ciudadano, el Ayuntamiento y el Área de Seguridad, en especial, debe seguir comprometido con el buen uso de la vía pública y anima a una regulación adecuada del uso de la misma, que priorice la convivencia vecinal por encima del negocio. A este respecto, va a seguir exigiendo que se consulten y se condicionen las ubicaciones y su extensión evitando que se instalen donde ya hay una acumulación de bares con veladores, afectando a las zonas dedicadas para el esparcimiento ciudadano como parques o jardines, o limitando la accesibilidad y a la movilidad.

De la misma forma, para el próximo año "se va a exigir que se consulte a los consejos de distrito previamente a la instalación de cruces con veladores que ocupen la vía pública, especialmente en el casco, para reducir su impacto en la vida vecinal y comercial. Hay que evitar la acumulación de cruces con veladores en la vía pública, la falta de relación con el entorno y reducir las molestias por ruidos, suciedad y limitaciones a la accesibilidad y movilidad. Las cruces deben ser un elemento integrado en la vida cotidiana donde se instala y no ser un elemento ajeno a la misma cuando no contrario a la necesaria convivencia", destacó.

Estas palabras de De Gracia llegan después de que el pasado viernes la Asociación de Caracoles informara de que la tradicional caracolada, que este año cumplía su octava edición, se suspendía por "diferencias" con el Ayuntamiento. Entre esas diferencias se encuentran precisamente "los numerosos problemas sufridos a consecuencia de la gestión realizada por el área de autorizaciones de la Delegación de Seguridad Ciudadana y Vía Pública durante la tramitación de la campaña para la venta de caracol guisado". El teniente alcalde de Seguridad Ciudadana, Emilio Aumente, reconoció que "parece que ha habido diferencias con Vía Pública" y recordó que este año ha habido "un par de puestos sin autorización". Uno de ellos, según anotó el propio Emilio Aumente, es el que se instalaba en la Ribera, pero que este año no lo ha hecho porque "según el Consejo del Movimiento Ciudadana causaba molestias y, por eso, se ha ido al Contencioso".