La Federación de Protectoras de Animales de Córdoba (Fapac) y el Partido Animalista (Pacma) emitieron ayer sendos comunicados en los que "condenan enérgicamente" la muerte el pasado jueves por asfixia de nueve de los diez perros que se encontraban en un turismo a pleno sol y sin ventilación en la avenida Conde de Vallellano. Fapac informó de su deseo de emprender acciones legales contra el cazador que dejó a los animales encerrados, y declara que "nos presentamos como acusación particular en el procedimiento penal".

En el momento en el que se produjo la liberación de los perros, cinco ya habían fallecido, y cuatro más lo hicieron poco tiempo después en la Clínica Victoria. La única superviviente fue una podenca que, según Pacma, ya se ha entregado a la protectora Arca de Noé, muy conocida en la ciudad.

El Partido Animalista declaró que la supervivencia de este último cánido fue gracias a la intervención "in extremis" de los cuerpos policiales e informó de que el propio cazador intentó llevarse sin éxito al perro que sobrevivió del centro veterinario donde estaba ingresado. Para el responsable, Pacma pide al juzgado que se actúe condenándolo "a la pena máxima por cada una de la muerte de los animales". Además, la fuerza política anunció que "estamos impulsando una ley en defensa de los animales que permita actuar con mayor dureza y contundencia contra los que los maltratan". Será, añadió, una ley que prohiba la caza y por consiguiente la caza con perros, y aconsejó que mientras dicha normativa se redacte, jueces, administraciones y autoridades ejerzan "un mayor control sobre las condiciones en que tienen los cazadores a sus perros y a perseguir a los maltratadores que se dedican a envenenar animales". Estas últimas declaraciones se virtieron a propósito del envenenamiento de tres perros en las Jaras esta semana, un suceso que llegó a poner en peligro la vida de un niño que acabó en el hospital por manipular un cebo envenenado.

Fapac, por su parte, hizo hincapié en la necesidad de que las autoridades mantengan visible durante la celebración de Intercaza "un mensaje de alerta y condena al sufrimiento de los perros, que son criados y usados con meros fines lúdicos y de competición".