No hay duda. La lluvia ha sido la gran protagonista del arranque de las Cruces de Mayo desde que dieron el pistoletazo de salida el pasado jueves. El día de ayer sirvió de transición hacia las jornadas grandes, con considerables chaparrones hasta media tarde y una mejora paulatina a medida que se fue acercando la noche. Según contabilizó la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las lluvias dejaron más de 18 litros, una cantidad algo pequeña si se tiene en cuenta que justo un día antes, el viernes, se superaron los 40 litros.

De esta forma, las ganas que se mantuvieron guardadas durante el arranque de la cita pasaron a concentrarse en el día de ayer, ya por la noche, después de que a partir de las 17:30 el sol empezara a hacer acto de presencia. Se notaba en la zona Centro, la más poblada de cruces, que los cordobeses ya tenían ganas de tomarse el rebujito sin necesidad de refugiarse bajo el paraguas.

Aún así todavía habrá que ser poco aventurero en eso de lanzarse a la calle sin paraguas. Aunque las previsiones de la Aemet para hoy y mañana apuntan a una probabilidad de lluvia muy pequeña, de entre un 10% y un 20%, nunca se sabe cómo se comportará el viento.

Con ello, la noche de ayer fue la más multitudinaria de todas las que ya han transcurrido hasta el momento dado que las lluvias presentes en el jueves y el viernes prácticamente desaparecieron. Desde las cruces con más tendencia a llenarse de jóvenes, como la del Bailío (de la hermandad de la Paz) o la del Císter (de la cofradía de la Sangre), ya avisaron de que el arranque de la fiesta había estado estropeado por el agua. Así, aquellos recintos que no han podido, por diversas circunstancias, instalar carpas o veladores han visto menguar mucho sus ingresos con respecto a años anteriores en los que el buen tiempo protagonizó la fiesta. Eso sí, la tregua de los chubascos y las ganas acumuladas permitieron que la noche de ayer, como ya se ha dicho, fuese algo más movida que las anteriores. En pleno puente y con Córdoba hasta los tope de turistas no extrañó ver un ir y venir de gente por las plazas de la ciudad a la espera de poder admirar las cruces y acompañar las vistas de fino, cerveza y bolitas de flamenquín.

Con ello, y como estos días atrás no han sido los mejores para las barras de las distintas hermandades y asociaciones, el Ayuntamiento anunció que alargará el horario de los recintos. La delegada de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento, Carmen González, explicó que "debido a la lluvia que ha acompañado estos primeros días del Concurso de Cruces, se ha decidido alargar el periodo de apertura de las mismas hasta el lunes 1 de mayo a las 23.00", considerado éste "el máximo horario posible para la correcta convivencia entre las distintas fiestas ya que el día de 2 de mayo a las 11.00 comienza la Fiesta de los Patios". En un principio, el horario marcado indicaba que las cruces cerrarían definitivamente a las 17:00. González indicó que esta medida se toma para que los colectivos "que con mucho esfuerzo montan sus cruces, así como el resto de cordobeses, puedan disfrutar con buen tiempo de una celebración tan querida como son las Cruces de Mayo". A lo que añadió que así se compensarán esas pérdidas de días atrás para que puedan reunir los fondos suficientes para las distintas actividades que realizan a lo largo del año. A ello, la delegada de Promoción de la Ciudad añadió que de 17:00 a 20:00 deberán funcionar sin música y en cuanto a las infraestructuras, deberán estar recogidas el martes día 2 a las 12:00, mientras que antes de la extensión del horario era a las 23:00 del día 1.