354 días. Casi un año. Este es el tiempo que el propietario de una vivienda tarda en echar a un inquilino que haya dejado de pagar las mensualidades del arrendamiento de la vivienda. Así se desprende del informe anual realizado por Alquiler Seguro, la primera empresa privada especializada en la protección a propietarios. El análisis con el que se evalúa la situación del mercado inmobiliario de los alquileres en la actualidad muestra esta dato muy relevante y preocupante para los propietarios cordobeses. El estudio de Alquiler Seguro desvela que un arrendador necesita 354 días para desalojar a un inquilino moroso, desde que este deja de hacer frente al pago de las rentas hasta que se hace efectiva la demanda de desahucio. Córdoba, no obstante, es la provincia andaluza analizada en la que menos tiempo es necesario para hacer efectivo un desahucio. En Sevilla el tiempo se demora hasta los 367 días, el dato más alto de toda España, y el Málaga hasta los 359. En cualquier caso, la media ronda siempre el año, demasiado tiempo para una situación que se vuelve en insostenible para los propietarios, que dejan de percibir unos ingresos durante ese periodo que en la mayoría de los casos son determinantes para su economía.

Iniciar un proceso de este tipo es bastante complicado. Primero hay que ponerse en contacto con un abogado para que revise el contrato de arrendamiento, desarrolle acciones extrajudiciales para intentar que el inquilino pague y/o abandone la vivienda -lo que se hace a través de llamadas, cartas y burofax-, solicite y recopile la documentación necesaria para preparar la demanda de desahucio y que el propietario otorgue un poder hacia el procurador. Después viene la denuncia y se inicia el proceso judicial, que es lo que más puede tardar hasta que se produce el alzamiento.

La Radiografía del Mercado del Alquiler muestra también otros datos relevantes. Entre los diferentes indicadores con los que se evalúa la situación actual del alquiler en Córdoba, destaca el dato del Índice de Mercado del Alquiler de Vivienda (IMAV), que en la provincia alcanza los 0,85 puntos, el dato más bajo de las provincias analizadas. El valor que arroja IMAV para la provincia de Córdoba es característico de un mercado en el que la oferta y la demanda están equilibradas (IMAV entre 0,80 y 140).

En el análisis también se aprecia cómo la medida, que pone en relación la oferta de viviendas en alquiler con las búsquedas activas de inquilinos en una localización concreta, refleja que en Córdoba el IMAV está cerca de presentar un mercado bajista, ya que en la actualidad solo supera en medio punto la barrera de 0,80 con la que el mercado deja de estar en detrimento para ser equilibrado.