Córdoba

La crecida del río vuelve a poner en alerta a las parcelaciones

  • El Ayuntamiento activa el nivel de prealerta por el riesgo de anegaciones en Alcolea y en la zona del Aeropuerto. Los pantanos de la provincia se encuentran al 98% de su capacidad.

La nueva crecida del Guadalquivir causada por las lluvias torrenciales de los últimos días volvió ayer a poner en jaque a los vecinos de las parcelaciones, que vieron de nuevo cómo el caudal se acercaba peligrosamente a sus viviendas. Tal fue la avenida de agua que el Ayuntamiento activó la situación de prealerta en las zonas cercanas al cauce, lo que implicó que un total de ocho patrullas de la Policía Local y cuatro de Protección Civil conformaran un dispositivo especial para informar a los residentes de las zonas más sensibles, según informó la concejala de Seguridad, Carmen Sousa, que visitó la zona junto al responsable de Urbanismo, Luis Martín. Al cierre de esta edición, no se habían producido desalojos en la capital, aunque el temor de los residentes era creciente desde primera hora de la tarde.

"Los vecinos están muy preocupados, eso es indudable", dijo el presidente de la Asociación La Altea, Julio Cortés, cuyo vecindario ya sufrió las consecuencias de las anegaciones en 2010. Cortés expresó el "cansancio" por sufrir la segunda situación de alerta en el plazo de un mes e instó a los responsables de la cuenca a actualizar el protocolo de desembalses, pues "no se cambia desde 1926". "Ahora hay sistemas predictivos mucho más avanzados que deberían tenerse en cuenta", dijo.

El trasiego de policías y voluntarios de Protección Civil fue continuo durante toda la jornada, al tiempo que el río iba creciendo. Fuentes de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) reconocieron que, lejos de menguar, la previsión para las próximas horas es que el caudal sea "creciente", conforme recoja el agua de las últimas tormentas en la vecina provincia de Jaén.

La situación empezó a empeorar de madrugada. A las 02:30, cuando el caudal superó los 1.100 metros cúbicos por segundo a la altura de la localidad de Villafranca, el Servicio de Información Hidrológica de la CHG envió el primer mensaje al 112 para advertir a Protección Civil del riesgo de anegaciones en Alcolea, Guadalvalle, Majaneque, Pilar de la Vega, Las Cigüeñas, Rosal del Rubio, La Altea y Fontanar de Quintos. A lo largo del día, y conforme el caudal crecía, la CHG emitió otros tres informes. Al cierre de esta edición, el caudal alcanzaba los 1.565 metros cúbicos por segundo a su paso por Villafranca -este punto se toma como referencia para la capital-. En el azud de Alcolea, la lámina de agua llegaba a 5,69 metros de altura según el registro de las 23:00.

No ayudará mucho la previsión del tiempo para los próximos días, a lo que se une las precipitaciones de las últimas horas. El observatorio meteorológico ubicado en el Aeropuerto recogió 27,4 litros en las últimas 24 horas. La lluvia dará hoy una tregua, pero regresará mañana miércoles. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el riesgo de precipitaciones alcanzará el 95% entre las 12:00 y la medianoche. El jueves, la probabilidad de lluvias oscilará todo el día entre el 85 y el 90%, mientras que el viernes bajará hasta el 65%. La web eltiempo.es calcula que, entre el miércoles y el viernes, caerán en Córdoba capital más de 30 litros por metro cuadrado.

La tormenta ya dejó ayer sus efectos en la ciudad. El Centro de Coordinación de Emergencias (Cecem) 112 informó de que un vecino de Alcolea alertó a las 16:10 de una balsa de agua de diez centímetros en la calle Ribera Baja. Hasta la zona se desplazaron efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) del parque del Granadal, aunque los bomberos finalmente no tuvieron que intervenir porque el agua no entró en las viviendas.

La previsión de lluvias para los próximos días obligará a la CHG a mantener abiertas las compuertas de San Rafael de Navallana, que por la tarde expulsaba 134 metros cúbicos de agua por segundo, la misma cantidad que le llegaba. El objetivo -explicaron las fuentes consultadas- es hacer lo posible por recuperar los niveles de resguardo, aunque a estas alturas la empresa parece ya imposible, pues San Rafael de Navallana, el pantano de referencia para las parcelaciones debido a su proximidad a estos núcleos de viviendas, se encontraba a las 20:30 de ayer al 101,9% de su capacidad, con 159 hectómetros cúbicos. La presa del Guadalmellato, que vierte en el anterior, se hallaba al 98,8% de su capacidad, con 144,9 hectómetros cúbicos. Todas las presas de la provincia registraban valores similares, desde Iznájar -al 98,13%- a La Breña II -al 97,25%-. Yeguas y Martín Gonzalo superaban ya al 100%, mientras que Sierra Boyera, con el 91%, era el que más margen de movimiento tenía, según los datos recabados por el Sistema Automatizado de Información HIdrológica (SAIH). Los pantanos de Córdoba se encuentran, de media, al 98,65%.

Mientras los vecinos de las parcelaciones del Aeropuerto y Alcolea asistieron a una tensa espera, en el municipio de Villafranca sí hubo que pasar a la acción. El alcalde, Francisco Javier López, confirmó el desalojo preventivo de 30 familias de la zona de Huertas Familiares por la crecida del Guadalquivir, aunque no llegó a producirse un desbordamiento del río. En la zona existen alrededor de 200 parcelas, aunque sólo una treintena son de primera residencia. El Ayuntamiento habilitó el pabellón polideportivo para los vecinos que requirieran ayuda, aunque finalmente todos los afectados encontraron alojamiento en casa de familiares. El agua no llegó a las viviendas, pero "hay indicios de que esto podría ocurrir en las próximas horas", reconoció el primer edil, quien recordó que la zona fue evacuada en 2010 con motivo de la anterior crecida del Guadalquivir.

Las lluvias también provocaron problemas en la red de carreteras. La Dirección General de Tráfico (DGT) advertía de cortes en tres vías de la provincia a última hora de la tarde por balsas de agua. En Córdoba capital, la CO-3204 estaba cerrada al tráfico entre los puntos kilométricos 1,5 y 7 en ambos sentidos de la circulación. Los otros dos municipios afectados fueron Baena -con problemas a la altura del kilómetro 20 de la A-3125- y Espejo -CO-4205, con un corte entre los kilómetros 4 al 6 en ambos sentidos de la circulación-.

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