Ya está constituido el clúster halal con el que Córdoba quiere liderar la venta y distribución de productos con el sello de calidad apto para el mundo musulmán. El grupo de trabajo, que ya es una realidad, nace con la implicación de las administraciones públicas y empresas privadas, así como de la Universidad de Córdoba y con la incorporación de 11 firmas de Argelia, que están muy interesadas tanto en formar parte del clúster como en instalarse en Córdoba. El responsable del consorcio argelino Halal Córdoba, Djamel-Eddine Bouabdallah, explicó ayer que se trata de "una gran oportunidad" y que su interés se divide en dos cuestiones, por un lado la comercial y por otra la industrial. "Esta mañana hemos estado visitando suelos porque queremos comprar parcelas", explicó. Según las intenciones del Instituto Halal, que lidera la iniciativa, parte del futuro clúster se ubicaría en suelos de la Carretera de Palma del Río o, incluso, en Rabanales 21.

El clúster halal del Córdoba es el segundo del mundo, pues sólo hay otro organismo similar en Malasia. La presidenta del Instituto Halal, Isabel Romero, explicó que a partir de ahora contarán con un presupuesto de 70.000 euros hasta que finalice el año y que, a partir de 2018, confían en poder optar a subvenciones europeas. El grupo está inmerso en la obtención por parte del Gobierno de la denominación como cluster y en el plan estratégico, que es necesario para la concesión de la certificación, y está previsto un foro internacional Afro-Mediterráneo sobre halal, que será probablemente a finales del mes de noviembre y principios de diciembre y se reunirá a los interlocutores, tanto de gobiernos, como de entidades de certificación Halal. El clúster tiene 13 vocalías en las que estarán representadas distintas empresas que van desde la alimentación a medicamentos o turismo.

La alcaldesa, Isabel Ambrosio, explicó que la aprobación de los estatutos de este consorcio y su constitución supone "una gran oportunidad de negocio a través del mercado halal. "Estamos hablando no sólo de alimentación, sino de turismo y otras muchos sectores" que se pueden comercializar. En este sentido aseguró que se trata de una "marca rentable y eficiente" en la que merece la pena invertir.

Ambrosio destacó que "de alguna manera hoy se cumple con ese compromiso y esta tarea pendiente en la ciudad "ya puede quitarse de la lista de tareas inacabadas".