La Cata del Vino Montilla-Moriles ha arrancado ya y en la explanada del Palacio de la Merced más de una treintena de bodegas y una decena de restaurantes esperan la llegada de miles de personas tras el corte de la cinta inaugural. 

Una cita que han inaugurado numerosos representantes institucionales y a la que no ha faltado el presidente  del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles, Javier Martín, quien ha asegurado que para esta 35 edición de la Cata han recibido solicitudes desde América, Europa y "casi todos los lugares del mundo". A su juicio, "hemos conseguido hacer una fiesta que trasciende nuestras fronteras".

Tampoco ha faltado al corte de la cinta inaugural el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, quien ha considerado que con esta muestra "cada vez que difundimos y promocionamos nuestros vinos también promocionamos nuestro patrimonio, nuestra riqueza como provincia y potencial gastronómico".

Para Ruiz, la Cata es también "una oportunidad más de conocer la denominación de origen Montilla-Moriles y la gastronomía cordobesa". 

En esta primera jornada, Bodegas Robles ha presentado Le Vin Violette (El vino violeta), fruto de la colaboración entre la Asociación Mujeres Supervivientes de Violencia de Género.

La cita se extenderá hasta el próximo sábado y rinde homenaje al 50 aniversario de la puesta en marcha de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos y de Montes de la Universidad de Córdoba.