Córdoba

Un broche final atrevido y étnico

  • El maestro Elio Berhanyer pone el broche final a la pasarela madrileña con una colección marcada por vestidos cortísimos

La última edición de la Cibeles Madrid Fashion Week cerró ayer sus puertas con el desfile del diseñador cordobés Elio Berhanyer. Una apuesta segura para poner el broche final a seis jornadas dedicadas a la presentación de la colección primavera-verano 2011. Y, como era de esperar, Elio volvió a subir a la pasarela unos diseños marcados por la elegancia, con cortes muy estudiados que se ciñen y modelan el cuerpo de la mujer. Una vez más reivindicó la costura, pero en esta ocasión con cortísimos vestidos, muchos de ellos palabra de honor y con drapeados, diseños a lo que Berhanyer no tiene muy acostumbradas a sus fieles.

Para abrir su desfile eligió a la modelo Arantxa Santamaría, quien fue la primera en mostrar las últimas ideas del creador cordobés, quien estuvo apoyado una vez más por sus numerosas seguidoras como, por ejemplo, Pitita Ridruejo. Entre aplausos las modelos desfilaban con diseños en los que el maestro eludió presentar pret a porter y mostró una colección compuesta por vestidos de cocktail y de fiesta. Todo ideado para ocasiones especiales.

Elio apostó de nuevo por el traje de luces, que en esta ocasión lució Monica de Tomas. Un vestido pintado sobre crepé de seda azul por la artista Virginia Valentí. Pero lo que más impactó entre los numerosos asistentes al desfile de clausura de la pasarela madrileña fueron los vestidos con aire étnico con los que quiso hacer un homenaje al mundo de los felinos y a África. Las modelos desfilaban sobre la pasarela con unos modelos elaborados con tejidos vaporosos con los que insinuaban sus curvas, e incluso algunos de ellos con estampados pintados a mano, aunque con colores claros y suaves.

Para el cierre de su desfile el maestro subió a la pasarela su última apuesta en vestidos de novia. En blanco nuclear y con detalles en raso, Elio mostró que la elegancia debe de estar presente en este momento tan especial, en el que la mujer debe de ser la protagonista indiscutible. En esta parcela, también apuesta por la vuelta del clásico velo que cubre el rostro de la mujer ante los ojos de sus invitados.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios