Se acabó la peregrinación administrativa y judicial de las obras de rehabilitación del Palacio de Congresos de la calle Torrijos. Tras años de atascos e intentos de resolver el contrato con la anterior adjudicataria, la Junta de Andalucía ya tiene las manos libres para retomar los trabajos. De hecho, la Administración autonómica informó ayer de que la sociedad pública Tragsa tiene ya en sus manos el último documento que restaba para que pudiera asumir oficialmente las obras, como es la encomienda de gestión, un trámite que se ha alargado algunas semanas más de lo previsto en un principio. Así, la delegada del Gobierno, Rafaela Crespín, y el responsable territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Manuel Carmona, hicieron ayer entrega al jefe de la Unidad Territorial Tragsa UT5 Andalucía-Extremadura de la empresa Tragsa, Ezequiel Montero, de esa encomienda de gestión. Tras este acto, la empresa pública, participada por la Junta de Andalucía, va a comenzar los trabajos para continuar la reforma del inmueble. "Desde hoy [por ayer], Tragsa trasladará los medios materiales y técnicos necesarios y dispondrá de los trabajadores necesarios para continuar con esta intervención que concluirá con el Palacio de Congresos en uso", indicaron desde la Junta.

Crespín apuntó que "contamos con todas las garantías para poder retomar las obras con todos los informes jurídicos favorables, así como el de la propia Intervención". Resaltó que "desde un primer momento, hemos querido llevar a cabo el proceso con toda la seguridad jurídica y tener la garantía de que las obras se van a llevar a cabo en el tiempo estimado para que la ciudad cuente con un equipamiento de congresos acorde a sus necesidades y las demandas del turismo de congresos". La delegada del Gobierno destacó la "profesionalidad y la calidad de los trabajos que lleva a cabo la empresa pública Tragsa, con experiencia en intervenciones en edificios singulares y en la protección del patrimonio", y defendió que es la mejor opción para retomar con todas las garantías "un proyecto fundamental para la ciudad del que se va a hacer partícipe en todo momento a los agentes socioeconómicos".

La rehabilitación prevista se llevará a cabo por fases. La primera se centrará en dar uso al salón de actos, que estará operativo el próximo año. En primer lugar, Tragsa se encargará de la recuperación de las obras realizadas con la limpieza de las zonas afectada y la retirada de escombros y paralelamente se redactará el proyecto para la dotación integral del salón de actos. Estas dos actuaciones pueden llevarse a cabo de manera simultánea. La tercera fase consistirá en la ejecución de las obras definidas en el proyecto. El coste de las intervenciones previstas es de 2,8 millones, incluidas las actuaciones complementarias que puedan surgir durante la fase de la limpieza.

Para tomar esta decisión la Junta ha encargado un informe a la Dirección General de Patrimonio sobre las obras de rehabilitación del Palacio de Congresos, en el que ha analizado el expediente completo y en el que incluye la relación de actuaciones y opciones existentes para la terminación definitiva de la rehabilitación y la puesta en servicio del edificio. Finalmente, el Gobierno andaluz ha elegido la opción que implica una inversión menor y que agiliza los tiempos para poder contar en el menor tiempo posible con este equipamiento.