El grupo cordobés Sánchez- Ramade tiene prevista una inversión inicial de 90 millones de euros para desarrollar varias plantas fotovoltaicas a corto plazo, según informó ayer el diario Expansión. Sánchez-Ramade instalaría un potencia de alrededor de siete magavatios derivados de energía solar para empezar es un sector que, de momento, es nuevo para ellos, aunque formen parte del accionarido de Iberdrola. Y es que, según el rotativo económico, la apuesta inicial del grupo cordobés es entrar en el campo de las energías renovables de forma individual, aunque tampoco descartarían alianzas.

Con la entrada en este apartado del sector energético, esta familia cordobesa diversifica sus actividades con un nuevo negocio. La iniciativa era esperada entre el empresariado cordobés puesto que las energías renovables se han convertido en uno de los puntos de mira más atractivos para los inversores.

La ubicación de estas plantas no ha sido revelada por el grupo cordobés, aunque las fuentes consultadas por este diario afirman que podrían repartirse entre varias provincias andaluzas, pero no hay nada cerrado. Sánchez-Ramade se dedica, entre otroas actividades, a la inmobiliaria, el cine, los electrodomésticos y la informática.