El coordinador de Política Sanitaria del PP cordobés y senador, Jesús Aguirre, planteó ayer la necesidad de que las administraciones públicas pongan en marcha "un protocolo único" para abordar los efectos adversos del Essure. Aguirre mantuvo un encuentro con varios miembros de la Plataforma Libres de Essure y con su presidenta en Andalucía, Susana Vázquez, en la que se pusieron de manifiesto "las graves situaciones que muchas mujeres están soportando a causa de este método anticonceptivo", según informó el PP.

En concreto, el Essure es una espiral de titanio y níquel que se utiliza como método anticonceptivo no reversible a través de la introducción de ese cuerpo extraño en las trompas de Falopio que las obstruye evitando embarazos. En Córdoba comenzó a aplicarse hace 15 años en el Hospital Universitario Reina Sofía como "un innovador método esterilizador", siendo este hospital "pionero en la utilización de este método". Los efectos que este método ha tenido en multitud de mujeres van "desde las reacciones alérgicas, hemorragias, dolores continuos, pasando por embarazos no deseados que han terminado en aborto por los efectos del metal de ese muelle". Su retirada conlleva "la mutilación de las trompas y en algunos casos la extirpación del útero o problemas digestivos". Según expusieron las propias afectadas, "este método nos ha destrozado la vida". En la actualidad está suspendida su comercialización y distribución a nivel europeo. En Córdoba hay más de 1.000 mujeres afectadas y existen largas listas de espera para su extracción.

Por todo esto, desde el PP expresaron su apoyo a las mujeres afectadas por este método y apuntaron que "es necesario un protocolo único para el abordaje de cada caso concreto, y así como formación específica para la atención primaria en el diagnóstico de sospecha de los efectos adversos del Essure".