La construcción de dos nuevas comisarías en Córdoba, una en la Plaza del Moreal para el distrito de Levante y otra próxima a la circunvalación de la ciudad, en la prolongación de la Avenida de Manolete, continúa dando de qué hablar desde que comenzara hace varios meses el proceso que en teoría debe desembocar en el comienzo de las obras a finales del año que viene. El secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, dejó claro que el proceso sigue adelante y que "nos encontramos inmersos en la elaboración de los nuevos presupuestos en los que se incorporarán partidas destinadas a suplir esta necesidad urgentísima". Pero para que se lleve a cabo este proyecto, que, según el secretario, contará con una inversión de diez millones de euros, "resulta indispensable que se resuelva el tema del suelo". Nieto aseguró que están "deseosos" de que se les "ofrezca, en los términos que considere oportunos el Ayuntamiento ese suelo donde se tienen que construir las comisarías y, en cuanto se reciba, se incorporará al presupuesto de Interior, y en este caso de la Secretaría de Estado de Seguridad, para que se lleven a cabo". El secretario de Estado de Seguridad dijo que ignora "cuánto tardará" dicho trámite, pues con "los temas de la Gerencia es difícil hacer pronósticos", aunque confió en "que sea muy pronto", pues el Gobierno está ya "en plena elaboración de los presupuestos de 2018".

Ante estas declaraciones, el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Pedro García, mostró su "sorpresa" e indicó que desde el Ayuntamiento "se hicieron una serie de matizaciones a la propuesta de convenio elaborada por el Ministerio a principios de julio" y que "aún no han recibido respuesta". "Por tanto", concluyó García, "la pelota no está ahora mismo en la Gerencia, está en Interior. En este sentido, García le pidió "lealtad institucional" al secretario de Estado de Seguridad.

Estas nuevas edificaciones sustituirían respectivamente a las actuales ubicadas en Campo Madre de Dios y en Parque Figueroa, ambas en un estado altamente deteriorado. El proceso está siendo una carrera plagada de obstáculos a la que han asistido como público sindicatos y colectivos policiales que empezaron a alzar la voz para exigir una nueva comisaría desde hace años.