La pugna en el PP cordobés por hacerse con la Presidencia del partido continúa hacia delante. Ayer finalizó el plazo para presentar los avales necesarios para poder optar a ser precandidato al puesto con un mínimo establecido de 90 apoyos, cifra que, ya se intuía, ambos candidatos superaron. No lo hicieron, eso sí, de la misma forma. El actual secretario general del PP de Córdoba, Adolfo Molina, presentó un total de 1.745 avales, según informaron fuentes del partido a el Día. Mientras, su competidora, la parlamentaria andaluza Rosario Alarcón se hizo con 333 apoyos de los afiliados cordobeses. La diferencia, de 1.412 avales, no tendría por qué significar nada de cara a las futuras votaciones, dado que esta recogida es un paso más simbólico que otra cosa. Sin embargo, los apoyos mostrados a uno y a otro sí han quedado claros y eso se ha traducido, inevitablemente, en esa gran diferencia. En este caso, el actual presidente del partido en Córdoba, José Antonio Nieto, que deberá abandonar el cargo por incompatibilidad con su puesto de secretario de Estado de Seguridad, ya ha partido una lanza a favor de Molina, y a él lo han seguido otros tantos demostrando así la fuerza que el secretario general tiene en esta pugna.

Con todo ello, Alarcón se mostró satisfecha con el respaldo conseguido y así lo hizo saber a través de su perfil en Facebook, red social que ha utilizado mucho durante la recogida de avales. "Estoy muy satisfecha con el resultado que hemos obtenido en un tiempo récord", publicó, para añadir que la suya es la candidatura de "la unión, la democracia interna, la ilusión y la integración". El mismo medio utilizó Molina para agradecer el apoyo mostrado y manifestó que esto mismo "me anima a trabajar aún más por hacer del PP de Córdoba un partido aún más grande contando con la colaboración de todos y cada uno de sus afiliados".

Será mañana cuando comience la campaña para que ambos candidatos continúen en esa búsqueda de apoyos de cara al Congreso Provincial del 3 de junio, donde se procederá a la votación final. Sin embargo, cabe la posibilidad (hay quienes dentro del partido piensan que casi con total seguridad ocurrirá esto) de que se llegue a ese Congreso Provincial con un único candidato. La razón, el 8 de mayo tendrá lugar una votación de los compromisarios. Si en la misma alguna de las dos opciones consigue más del 50% de los votos y con ello logra una diferencia igual o superior a 15 puntos sobre la otra, será proclamada ante el Congreso como único candidato a presidir el PP.