La Guardia Civil ha abierto una investigación tras el hallazgo por parte de un agricultor de restos humanos mientras araba en una finca ubicada cerca de la prisión provincial, en la barriada periférica de Alcolea, según confirmaron ayer fuentes cercanas a la investigación.

Fue el agricultor quien se puso en contacto con los agentes del Instituto Armado alrededor de las 13:00 del pasado jueves para informar del hallazgo de estos restos humanos mientras llevaba a cabo su trabajo en esa zona agrícola con su tractor.

El Instituto Anatómico Forense lleva a cabo la identificación

Tras conocer la información, hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes del Instituto Armado, que al comprobar la existencia de los restos humanos se pusieron en contacto con la comisión judicial, que también acudió hasta la citada finca y donde acordó el levantamiento de los restos. Estos fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense, donde hasta ayer se le realizaron pruebas para intentar determinar a quién corresponden estos restos. Las mismas fuentes no pudieron confirmar si los restos pertenecen a un hombre o a una mujer y reconocieron que aún "no están identificados".

Los restos fueron localizados en la carretera CO-3200, cerca de un arroyo, y añadieron que, por el momento, no se ha podido determinar su antigüedad.