Córdoba

Cancelado

  • El último vuelo de la compañía aérea Flysur, con destino a Barcelona, contó con 38 pasajeros · Córdoba se queda, de nuevo, sin conexión aérea con el resto de España

Se acabó. Por ahora, pero se acabó. La actividad comercial del aeropuerto ha vuelto a pasar a mejor vida. Flysur dejó ayer de operar y, con ello, muchas expectativas para muchos sectores de la ciudad se frenaron en seco. La historia de la compañía concluyó cuando 38 pasajeros subieron al ATR-42 con destino a Barcelona a eso de las 15:20 y uno de los operarios del aeródromo cerró la puerta de embarque. Ahora, todo son incógnitas y buenas intenciones, aunque lo que está claro es que el aeropuerto retrocede otra vez 23 años en el tiempo.

La jornada de ayer constituye uno de esos días que pasarán a la historia de proyectos que nacen con unas buenas previsiones pero que no suelen cuajar en esta ciudad. A diferencia del pasado 4 de septiembre, cuando la compañía puso a disposición de los medios de comunicación todo tipo de facilidades, la imagen de ayer fue totalmente distinta. Sin declaraciones y con bastantes restricciones para cubrir el -también- histórico viaje a pesar de los permisos emitidos por la entidad Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).

Los primeros en llegar al aeródromo fueron tres pasajeros a eso de las 10:00 desde la Ciudad Condal. Y lo hicieron casi en el último instante porque durante el trayecto se les informó de la posibilidad de desviar el vuelo hasta Sevilla, dada las condiciones meteorológicas, que desde luego no eran de lo más adversas a esa hora de la mañana. Uno de esos tres pasajeros fue el empresario cordobés Antonio Pérez que suele viajar con frecuencia a Barcelona. "Lo único que sabía es que Flysur suspendía los vuelos", comentó. Para este empresario, la decisión de la compañía aérea es "mala" porque la "combinación era estupenda para mí". Es más, también criticó las instalaciones aeroportuarias y afirmó que "parece que aterrizas en un cortijo, es penoso". No obstante, reconoció que por ejemplo la salida que se efec´uaba de los domingos -antes de las 08:00 desde Barcelona- "era muy temprano". Lola Aguilar trabaja en el aeropuerto de Ibiza y hasta hace apenas mes y medio cada vez que quería venir a Córdoba tenía que ir al aeropuerto de San Pablo en Sevilla, combinación que tendrá que volver a efectuar. "Me gustaría que hubiera un buen aeropuerto ya aquí", sentenció.

Y mientras ellos llegaban, una docena de pasajeros esperaba su turno para coger el avión con destino a Vigo. Entre el grupo, se encontraba Valentina Pérez, natural de la citada ciudad gallega y que acudió a Córdoba "por un evento en concreto". Aseguró que era un viaje de carácter extraordinario y de "pura casualidad", tanto para ella como para el resto de su familia que la acompañaba. Además, dijo que la decisión de Flysur de cancelar los vuelos "es una pena, pero se entiende porque el viernes sólo veníamos 14 personas en el avión".

Y mientras unos llegaban y otros tomaban rumbo a la capital gallega, Pedro y su mujer, Carmen, contemplaban la escena; la última que verán hasta que alguna compañía reanude los vuelos desde Córdoba. Este matrimonio acude todos los domingos al aeropuerto a desayunar desde hace unos cinco años y, ayer no podían faltar. Es más, se llevaron hasta la cámara de fotos para inmortalizar el viaje de Flysur. "Ha sido una historia muy bonita, pero corta y ahora no sabemos lo que se va a tardar en recuperar la actividad", sentenció Pedro, quien consideró que la empresa debería haber dispuesto otros destinos, en lugar de Vigo, Bilbao y Barcelona. Su mujer asintió recordando "los viajes que antes había los fines de semana a Baleares". Para Carmen, las Islas Canarias o Valencia hubieron sido los destinos perfectos. El matrimonio, que a pesar de todo continuará yendo a desayunar todos los domingos al aeródromo, hizo especial hincapié en la necesidad de que Córdoba cuente con nuevas instalaciones aeroporturias. "Necesitamos un aeródromo nuevo; si éste se amplía quedará muy cerca de la ciudad", apuntaron. Ambos no fueron los únicos cordobeses que se acercaron a echar un vistazo al aeropuerto en el día en que se apagaron los motores. Por pura curiosidad, algunas personas se acercaron a las instalaciones para comprobar por sí mismos el aterrizaje y el despegue de las aeronaves.

A pesar de ello, el día transcurrió con total normalidad en el aeropuerto, hasta que el avión de Flysur volvió a tocar suelo cordobés a eso de las 15:00 procedente de Vigo con una decena de pasajeros a bordo. Mientras, en la puerta de salidas 38 personas -los últimos pasajeros de este nuevo episodio del aeropuerto- pasaban por el arco de seguridad antes de poner rumbo a Barcelona. Sorprendidos por la expectación entre los medios de comunicación, la mayoría de los viajeros mostró con orgullo sus pasajes. Una escena que no se repetirá en un largo plazo de tiempo en el aeródromo, a menos de que otra compañía aérea inicie una aventura, como la que ayer Flysur dio por cancelada.

Hasta la llegada de Taer Andalus han pasado algo más de 23 años para que el aeropuerto de Córdoba recuperase su actividad comercial. Comienza ahora una etapa llena de incógnitas a la espera que de AENA concluya la torre de control precisa para operar, que la ampliación del aeropuerto sea una realidad y desde Córdoba se pueda volar de una vez por todas a España y el extranjero.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios