El portavoz del Cabildo Catedral de Córdoba, José Juan Jiménez Güeto, destacó ayer, respecto a la titularidad de la Mezquita-Catedral de Córdoba, que nunca ha sido un bien público, sino que es privado, propiedad de la Iglesia Católica, aunque está a disposición del público. Jiménez Güeto señaló que la Mezquita "en ningún momento ha sido un bien público", es decir, no ha pertenecido nunca al Estado, sino que "ha sido un bien privado, de la Iglesia, pero a disposición del público, en general, que así lo goza y disfruta todo aquel que viene".

Además, según destacó Jiménez Güeto, es el Cabildo el que, a lo largo de "los últimos 21 años", ha dedicado "más de 24 millones de euros al mantenimiento y conservación de la Mezquita", sin que haya "puesto nada (para ello) en este tiempo ninguna administración pública", salvo la Junta de Andalucía que, según aclaró, aportó "hace poco unos 6.000 euros" para "unas celosías en los lucernarios del mihrab". De hecho, el Cabildo está ahora culminando la preparación del proyecto de restauración del mihrab y de la macsura de la Mezquita, contando para ello con un "estudio que está haciendo el Instituto Andaluz de Patrimonio", para el que el Cabildo destina "más de 100.000 euros".

La alcaldesa, Isabel Ambrosio, respondió a estas palabras y afirmó que "la Mezquita-Catedral tiene que seguir siendo patrimonio de todos". Ambrosio manifestó que "no se trata de dar o de pedir, sino que se trata de alguna manera de colocar el ámbito de la legalidad y con el cumplimiento de la norma una demanda". Al respecto, aseveró que dicha demanda "la comparten la mayoría de los cordobeses sobre un espacio que es Patrimonio de la Humanidad y que también le pertenece al resto del mundo".