"Creo que es bueno que sea un perfil clínico" quien se ponga al frente de la dirección del Hospital Universitario Reina Sofía. Quien hizo ayer esta afirmación fue su antecesora en el cargo y actual consejera de Salud, Marina Álvarez, quien tuvo su primer acto público en Córdoba tras su nombramiento el jueves como máxima responsable de la sanidad en Andalucía. Álvarez fue la encargada de cerrar los actos de la XV Semana del Donante que se ha celebrado en la capital durante todos estos días y reconoció que ella prefiere que su sucesor o sucesora en el cargo tenga ese perfil clínico, al igual que ella. "Todavía no sabemos, esperamos que sea lo antes posible y que en breve esté una persona" al frente de la dirección del complejo sanitario, anotó. Entre otra de las demandas que Álvarez lanzó al próximo responsable del Reina Sofía fue que "siga con la misma fuerza y entusiasmo trabajando" que ella ha tenido y, por eso, incidió en que "apostamos por un perfil que continúe la participación". A su juicio, el Reina Sofía es "un hospital donde los responsables de sus unidades son muy participativos y también con el resto de los centros". "Esa es la clave y tenemos que seguir en esa línea compartiendo esa responsabilidad", reseñó.

Tras su nombramiento como consejera de Salud por la presidenta de la Junta, Susana Díaz, la que fuera gerente del Reina Sofía -cargo al que llegó en 2014- confesó que ahora tiene "muchos sentimientos juntos". "Por una parte sientes alegría de que piensan en mi y en mi trabajo", reconoció. Sin embargo, Álvarez también confesó que siente algo de pena "porque dejo el Reina Sofía al que he estado ligada toda mi trayectoria profesional". También echó la vista atrás y señaló que además de desarrollar su carrera profesional como médico -es radióloga, su vida laboral ha estado siempre ligada al tratamiento del cáncer del mama y está considerada un referente andaluz y nacional en su diagnóstico y tratamiento- también "he tenido la suerte de tener cargos de responsabilidad". De hecho, ha sido directora de la Unidad de Gestión Clínica Interprovincial de Radiología y Cáncer de Mama del Reina Sofía y del Área Sanitaria Norte de Córdoba, así como del programa de detección precoz de esta enfermedad en la provincia. En 2013, recibió la Medalla de Andalucía en 2013.

Uno de la bases de trabajo al frente del área será ofrecer "una asistencia de calidad"

Unos cargos y un trabajo que, según indicó, ha podido "compartir con los profesionales" sanitarios. Un hecho que calificó de "privilegio porque me han permitido mejorar". "Ser consejera de Salud es un estímulo muy importante para seguir trabajando; soy consciente del reto y tenemos que seguir avanzando en el sistema público sanitario", anotó e insistió en que "tenemos que seguir reforzando la línea estratégica y mejorar la calidad y asistencia que prestamos, facilitando la participación de los profesionales, que tienen mucho que aportar."

Ante su gestión al frente de la Consejería de Salud, reconoció que por ahora "es un momento de reflexión" y que confía en que "nos permita planificar para ver las actuaciones que vamos a llevar a cabo". No obstante, avanzó que habrá que "trazar líneas estratégicas que nos permitan seguir manteniendo esa confianza en el sistema público y, sobre todo, la accesibilidad y asistencia de calidad en base a la evidencia científica e incorporar innovaciones y permitiendo la participación de profesionales y no olvidar la investigación, la formación y la innovación".