La Asociación Pro-Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) en Córdoba alertó ayer del "estigma" al que se está sometiendo al colectivo de rumanos residentes en la capital contra los que, apunta, se han lanzado dos campañas que intentan atajar la mendicidad con menores. El vocal de Inmigración de la APDHA en Córdoba, Carlos Arce, presentó una queja al Defensor del Ciudadano de Córdoba, Francisco García-Calabrés, donde denuncia la existencia de unos carteles no firmados expuestos en varios escaparates en los que se anima a los cordobeses a sumarse a la lucha contra supuestas mafias que explotan a los mujeres y menores rumanos.

Respecto a la presencia de carteles bajo el lema Con niños no se pide, indicó que "es una manera de estigmatizar" a un colectivo que está "en exclusión social", lo que puede llevar a generar "atisbos de actividades racistas y xenófobas". Así, hizo un llamamiento para que se actúe contra esto y evitar así el lamentarse "luego con otras acciones más graves".

La segunda campaña que criticó fue la lanzada por el Ayuntamiento, en la que se invita a los ciudadanos a que avisen sobre la presencia de personas que mendiguen con sus hijos y que incluye el incremento de la jornada laboral de trabajadores sociales entre el 20 de diciembre y el 5 de enero para que controlen la mendicidad infantil.

Sobre esta crítica, la teniente de alcalde de Bienestar Social en el Ayuntamiento, Ana Moreno, contestó a Arce asegurando que el Consistorio "quiere acabar con la mendicidad infantil, sean de donde sean los niños implicados, puesto que lo importante es que son menores". La edil aseguró que el Ayuntamiento, "conforme a la Ley", velará "siempre" por preservar los derechos de los niños y añadió que esta iniciativa "no es una acción aislada", sino que se une a otras que se desarrollan durante el año.