En una de las plazas más bonitas y tranquilas de Córdoba, la Plaza Cardenal Toledo, se encuentra la Taberna Bendita Locura, uno de esos sitios donde uno puede sacar el máximo partido al buen tiempo que reina ya en la ciudad, una vez que la primavera se ha instalado de manera definitiva y ha dejado atrás los fríos meses de invierno. Este local, pequeño pero coqueto, puede presumir de identidad propia y es un lugar inigualable para disfrutar del ambiente cofrade que en la ciudad se respira ahora que la Semana Santa aparece ya a la vuelta de la esquina. Su terraza, amplia y tranquila, llena de vida un local que sabe sacar el máximo provecho a sus dimensiones y dotar de un ambiente muy característico a este rincón tan coqueto de la ciudad.

La Taberna Bendita Locura es una iniciativa empresarial de Norberto Samblas, que hace en enero de 2016 se lanzó a la aventura de abrir su propio negocio, junto a dos socios, después de haber acumulado años de experiencia en el sector de la hostelería, aunque nunca como empresario. "Llevamos un año y poco abiertos y la verdad es que el negocio marcha muy bien, estamos contentos por la respuesta de la gente a nuestra propuesta", afirma Norberto, que explica ese carácter marcado que tiene su taberna y la identificación que hacen de ella con las costumbres de la ciudad: "Según la época del año vamos ambientando el local de una manera u otra. En los meses previos a la Semana Santa se respira mucho ambiente cofrade, durante mayo hay ambiente de cruces y al tener la terraza en tan buen sitio en esta época del año tenemos mucho más movimiento, aunque en Navidad también hemos recibido muy buena acogida".

Esta taberna, en poco más de un año de vida, ha comenzado a hacerse ya un nombre en la ciudad, entre gente de un perfil joven, pero maduro. Y es que además de ser un sitio que nunca falla, pues se mantiene abierto todos los días de la semana, ofrece una buena variedad de posibilidades a los clientes, que van desde los desayunos, abundantes y bastante económicos, hasta las copas de la noche, pasando por una ajustada pero acertada carta de tapas y raciones para disfrutar de la gastronomía más cordobesa.

En su carta se pueden encontrar productos tan clásicos y tradicionales como la cuña de tortilla de patata, la ensaladilla rusa, los boquerones en vinagre, el salmorejo o una buena variedad de chacinas y queso. También disponen de generosos montaditos a muy buen precio, con mención especial para el de pringá. Además, en Bendita Locura se pueden degustar sus empanadas, especiales y diferentes a las que uno puede probar en cualquier otro sitio, así como especialidades tan demandadas como el atún encebollado, la carrillada, la carne con tomate o el solomillo al whisky. Todo ello se puede disfrutar en raciones que no superan los siete euros, por lo que el precio es otro de los puntos fuertes de este negocio. Tanto es así, que por unos diez euros, cualquier comensal saldrá satisfecho en cuanto a bebida y comida de esta taberna.

Además, cuando el calor aprieta, en Bendita Locura lo combaten de la mejor manera posible, sirviendo la cerveza en unos característicos jarrillos metálicos helados, algo que en pocos sitios se ve y que refuerza esa identidad propia antes comentada de la que goza esta taberna.

Y por si fuera poco, Bendita Locura es una buena opción para conmemorar algún tipo de celebración, ya que por encargo se preparan arroces y peroles muy económicos y que son la excusa perfecta para celebrar con los amigos y la familia un día especial.

Todos estos condicionantes hacen de la Taberna Bendita Locura un lugar de obligado paso y parada durante esta primavera recién estrenada y muy especialmente en la Semana Santa que ya está en puertas, pues el mejor ambiente cofrade de la ciudad se encuentra en este coqueto local de la Plaza Cardenal Toledo, en el que uno puede empaparse de las costumbres más cordobesas.