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La Junta retrasa hasta marzo la apertura del nuevo vial de acceso desde la N-502

  • Obras Públicas achaca la demora a los "problemas" que ha tenido la unión de empresas encargada de una obra que debía haber concluido en marzo de 2010

La apertura del nuevo acceso viario a Los Pedroches, la A-435 que parte de la N-502 y llega hasta el casco urbano de Pozoblanco, tardará más de lo previsto en estar en servicio, con lo que su apertura definitiva se producirá en unos dos meses. Ese es el plazo que ha estimado el delegado de Obras Públicas y Vivienda de la Junta, Francisco García, quien ha señalado que esta demora en los trabajos se debe a "los problemas" que ha tenido la unión de empresas que está ejecutando las obras. Este nuevo plazo de marzo de 2011 para la también conocida como carretera del Iryda es el tercero que ofrece la Administración autonómica en el último año, ya que en febrero de 2010 se fijó la puesta en marcha de la vía para el verano, poco después de demoró hasta el otoño y ahora se vuelve a fijar una nueva fecha.

García precisó que en la zona más próxima a la N-502, la nueva carretera no cuenta todavía con la capa de rodadura, si bien se trata de un tramo de poco más de un kilómetro. A partir de ahí, la nueva carretera está totalmente asfaltada y a falta de colocar las señalizaciones y proceder a las labores de pintado. El delegado añadió que los trabajos se han extendido ya hasta la misma ronda de Pozoblanco, ya en el caso urbano, "por lo que es previsible en unos dos meses podamos ya abrirla al tráfico", dijo. Más allá de los problemas que las empresas adjudicatarias hayan podido atravesar en los últimos meses, el responsable provincial de Obras Públicas también se refirió al parón que se produjo en los trabajos tanto por el periodo vacacional navideño como por las precipitaciones del mes pasado. En este sentido, confió en que las lluvias no vuelvan a entorpecer el desarrollo de la actuación.

Este corredor aprovecha un antiguo camino rural, tiene una longitud de unos 13,5 kilómetros y la Junta de Andalucía está invirtiendo en su acondicionamiento casi 8,5 millones de euros. Una vez que esté abierto al tráfico, los conductores que realicen el itinerario entre Córdoba y Pozoblanco se ahorrarán casi nueve kilómetros, además de un notable descenso en el tiempo de conducción, en torno a 15 minutos aproximadamente.

Además, la carretera A-435 tendrá también una importante incidencia en la carretera entre Pozoblanco y Alcaracejos (A-423), el tramo de vía autonómica con más tráfico de la toda la zona Norte, ya que soporta hasta 6.500 vehículos de media diaria. También ayudará a descongestionar uno de los puntos más conflictivos de la comarca pedrocheña, como es el cruce de la travesía de Alcaracejos, paso obligado hoy día para acceder a Pozoblanco y que se podrá evitar en el momento en el que se abra la A-435.

El responsable de Obras Públicas también comentó que la Junta y el Ministerio de Fomento mantienen sus conversaciones para solventar la conexión de la nueva carretera con la N-502. Sobre este asunto, el delegado ya avanzó en su día que esta unión se solucionará con un cruce a distinto nivel en la confluencia de las dos vías, de manera que se garantice la seguridad del tráfico.

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