Provincia

El alcalde pide un certificado a Correos de que no ha recibido su expulsión

  • Acusa a Llergo de cobarde por no recoger el burofax en el que se pide una asamblea

El alcalde de Pozoblanco, Benito García de Torres, pidió ayer en Correos un certificado de no haber recibido el expediente de expulsión del PSOE remitido desde la ejecutiva federal, según ha podido saber El Día de fuentes municipales. Las mismas fuentes relataron que García de Torres pasó por la oficina postal alrededor de las 13:00 para comprobar si en ella se encontraba ya el burofax con una comunicación "que el secretario provincial del PSOE [Juan Pablo Durán] filtró a bombo y platillo antes de que lo supiera el propio interesado y, es más, ni siquiera he tenido una mísera llamada comunicándomelo", según ya dijo a este periódico el propio regidor municipal.

García de Torres se enteró de la noticia en la mañana del pasado lunes y sabe que tiene un plazo de diez días a partir de recibirla para presentar sus alegaciones ante la Comisión Federal de Ética y Garantías del partido. El alcalde ya insistió en que "en el mismo momento en el que reciba ese expediente, lo pondré en las manos adecuadas para realizar esas alegaciones".

A falta de burofax comunicando la expulsión, según el primer edil, otro burofax permanece en Correos a la espera de ser recogido, el que un grupo de militantes socialistas ha remitido al secretario local del PSOE, Manuel Llergo, para pedirle una asamblea en la que tratar una moción de censura a la ejecutiva local. "Es un gesto cobarde ese de no dignarse a recoger un burofax que incluye una demanda que está respaldada por más de un tercio de las firmas de la militancia", resaltó al respecto el regidor, apostillando que "Manuel Llergo sabe que lo ha hecho muy mal al frente de la ejecutiva local y que no es el hombre indicado para dirigirla, por eso tiene miedo, porque sabe que lo pueden quitar".

Con Llergo como alcaldable por el PSOE, García de Torres asiste desde la barrera a las negociaciones que mantienen los grupos políticos del Ayuntamiento de Pozoblanco por relevarle del sillón municipal. "Sigo abierto a que los grupos también lleguen a un acuerdo conmigo para acabar con esa ingobernabilidad que han provocado los cuatro concejales del PSOE que han entregado sus delegaciones", resaltó, recalcando que "han dejado el Ayuntamiento en tal situación que los proyectos no están parados gracias a que tenemos los mejores técnicos que un Ayuntamiento puede tener".

No obstante, tiene claro que "una de las mejores cosas que le puede pasar a la vida política local es que la abandonen los actuales ideólogos de IU, que mienten constantemente". Se refería así a Manuela Calero y Miguel Calero, quienes, como Juan Pablo Durán, tildaron de tránsfuga al alcalde. "No he pactado con nadie a espaldas del partido para ser un tránsfuga como sí han hecho otros del propio PSOE. IU olvida que tras las elecciones les ofrecí partir Urbanismo y Servicios Sociales en varias delegaciones y compartirlas con ellos para hacer un gobierno fuerte, pero resulta que lo querían todo", dijo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios