Nieve para celebrar el Día de Andalucía y para despedir febrero. Gran parte de la provincia de Córdoba, incluidas varias zonas de la capital, amaneció ayer literalmente en blanco. La nieve cubrió buena parte de los municipios de las comarcas de Los Pedroches, Valle del Guadiato, la Subbética y del Guadajoz, la Campiña Sur, incluida el Alto y la Vega del Guadalquivir. Sin duda, una estampa que dejó, por un lado, imágenes entrañables de familias disfrutando de la nieve y, por otra, estampas menos afortunadas, ya que la intensa nevada provocó cortes de luz de manera ininterrumpida durante buena parte de la jornada a varios municipios, así como que se registrasen hasta 26 incidencias en las carreteras, según informaron fuentes del servicio de Emergencias 112. Las mismas indicaron que estas incidencias se produjeron, en su mayoría, por vehículos que se quedaron bloqueados por la nieve. No en vano, la Dirección General de Tráfico (DGT) llegó a activar el nivel rojo de alerta en la carretera N-420, a la altura de Cardeña, donde fue obligatorio el uso de cadenas, al igual que en la N-432, en concreto, desde los kilómetros 190, a la altura de Peñarroya-Pueblonuevo, hasta el 250, en Obejo, durante buena paret de la mañan. Otra de las vías afectadas, según informaron desde la Subdelegación del Gobierno, fue la A-45, en concreto en el tramo entre los municipios de La Rambla y Benamejí. Las mismas fuentes indicaron que a partir de las 13:00 todas las incidencias por la nevada se habían resuelto.

La nieve y la lluvia, además, provocaron incidencias en varios municipios del Valle del Guadiato, como Villaviciosa de Córdoba, cuyos vecinos se quedaron sin luz y sin servicio telefónico -en el caso de los clientes de Movistar desde las 11:00, según fuentes del 112. Técnicos de Sevillana-Endesa trabajaron durante toda la jornada en la zona para recuperar un servicio afectado por la caída de postes por la nieve, que también provocó cortes en el suministro eléctrico en Peñarroya-Pueblonuevo. Los mismos problemas se vivieron en Belmez, Espiel, Villanueva del Rey y Fuente Obejuna, aunque en éste último el servicio eléctrico se recuperó a las 14:00; hacía ya varios años que no nevaba en la zona del Valle del Guadiato, concretamente la última nevada fue en 2010. Los municipios de Hinojosa del Duque y Hornachuelos también vivieron episodios similares. El suministro eléctrico, según el 112, volvió a todos los municipios afectados sobre las 20:45.

Un tupido manto blanco también cubrió las localidades de Cabra y Lucena, que vieron como las intensas precipitaciones en forma de nieve caídas durante más de tres horas en la madrugada anterior provocaron imágenes muy poco usuales. Los más mayores del lugar no recuerdan una nevada parecida en las últimas décadas, puesto que a primeras horas de la mañana el espesor que se registraba en el casco urbano de ambas localidades oscilaba entre los tres y cuatro centímetros. Además de escenas divertidas y alguna que otra caída, también se registraron algunas situaciones de riesgo que precisaron de la actuación de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. En concreto, las zonas verdes de ambas localidades tuvieron que se acordonadas después de que algunas ramas y árboles no pudieran soportar el peso de la nieve que acumulaban y terminaran por romperse, obstaculizando en muchos casos el tránsito de vehículos y personas por algunas zonas.

En Cabra, la Policía Local tuvo que asegurar zonas del parque Alcántara-Romero, la Fuente del Río y algunas calles donde algunos árboles situados en las aceras también se vieron afectados, como en el llanete de la parroquia de Santo Domingo de Guzmán donde un naranjo estuvo punto de partirse por el peso de la nieve.

Mientras tanto, en Lucena, una de las localidades de la provincia donde se registró una mayor cantidad de precipitación, se tuvo que poner en marcha por parte de las fuerzas de seguridad un dispositivo especial ante la cantidad de avisos recibidos por la nieve, aunque ninguno fue de gravedad. Varios vehículos fueron ayudados a salir de rotondas y calles a primera hora de la mañana puesto que el espesor de hielo y nieve, en algunas zonas del casco urbano, era superior a los cinco centímetros. Las arboledas también se vieron afectadas y fueron varias las ramas caídas en zonas como el Cristo Marroquí o la Plaza del Mercado y el Coso en el centro de la localidad, obligando a los servicios municipales a actuar con diligencia puesto que, en estos dos últimos casos, se trata de lugares muy transitados por viandantes y vehículos. La maquinaria -quitanieves y esparcidoras de sal- tuvo que emplearse a fondo en las carreteras de ambos términos municipales, que en el caso de las que dan acceso a los santuarios de la Virgen de la Sierra y la Virgen de Araceli tuvieron que ser cortadas al tráfico de vehículos por registrarse, en ambos casos, espesores de hasta 20 centímetros de nieve y placas de hielo que hacían muy peligroso el tránsito rodado. En torno al mediodía se volvió a restablecer la circulación en ambas vías y otras tantas carreteras que conectan con el resto de municipios de la Subbética y que discurren por pleno Parque Natural, lo que también permitió contemplar bellísimas imágenes de un paisaje que, anualmente, suele verse blanqueado por las nieves pero en ningún caso con la intensidad de ayer.

La nieve, provocó que en municipios como Montoro se tuvieran que suspender los actos previstos con motivo de la celebración del Día de Andalucía. Por ejemplo, en Montoro estaba previsto un paseo de caballos por la localidad, que se celebrará mañana si la meteorología lo permite en esta ocasión.

En Baena, la nieve caída fue menor a la de otros puntos de la provincia pero aún así, los tejados de las viviendas y los olivos de la sierra amanecieron completamente blancos y se mantuvieron así a lo largo de todo el día. Sin embargo, a apenas nueve kilómetros, la pequeña localidad de Zuheros se convirtió en una bonita postal donde la Sierra Subbética y sus típicas callejuelas aparecían cubiertas por hasta 15 centímetros de nieve. Hasta allí se desplazaban numerosos vecinos de la comarca para disfrutar de esta gran nevada y donde los más pequeños jugaron durante horas con la nieve. En la localidad de Doña Mencía se repitió la misma instantánea.

Los vecinos de Puente Genil también se levantaron con un gran manto de nieve, no en vano, hacía más de 40 años que se no daba una nevada como la que cubrió tanto la localidad pontanesa como la aldea de El Palomar.

En Priego de Córdoba las escenas se repitieron y numerosos vecinos a la zona de la Sierra Subbética para disfrutar de la jornada de nieve.

La nevada en la capital no fue tan intensa como en el resto de municipios de la provincia, aunque llegó a nevar ligeramente, pero no lo suficiente para que cuajara. Así las cosas, los bomberos realizaron una decena de salidas, sobre todo en la zona de Trassierra y el Mirador de las Niñas por la caída de ramas árboles y de cables dado el peso de la nieve. Al ser un día festivo, numerosas personas aprovecharon la jornada para subir hasta la barriada periférica de Cerro Muriano, Los Villares y a la zona de la Sierra para contemplar una estampa que no se repetía con tanta intensidad desde hace ya más de tres años.

Por cierto, la temperatura mínima que se registró ayer, según la Agencia Estatal de Meteorología, fue de 2,4 grados y la máxima de 8,2. El tiempo, a partir de hoy, comienza a mejorar.